Nature.com ha publicado una reseña de un estudio* llevado a cabo por científicos italianos en el que se ha demostrado que todos los cerebros contienen priones en la configuración denominada proteína priónica celular (PrPC) y que desarrollan funciones básicas en el funcionamiento del encéfalo.
La PrPC actúa en las células de la glía ayudando a que se mantenga la cubierta de mielina que aísla las células nerviosas y así se transmitan los impulsos eléctricos de forma correcta. Esta función se encuadra en un proceso denominado plasticidad cerebral, que engloba los cambios que se producen en la estructura y función de las neuronas cuando el cerebro crece y cambia como consecuencia de las experiencias.
Los priones pueden mostrar dos configuraciones diferentes: la normal o PrPC, que tiene una función básica en el desarrollo cerebral, y la que tiene como resultado el desarrollo de encefalopatías espongiformes, denominada PrPSc. Ya se sabía que la forma PrPC era abundante en las neuronas, especialmente durante el periodo de desarrollo, y su situación ligada a la membrana celular hacía suponer que estaba implicada en la transmisión de la señal nerviosa, aunque hasta ahora no se había podido demostrar.
*Maddalena D. Caiati, Victoria F. Safiulina, Giorgia Fattorini, Sudhir Sivakumaran, Giuseppe Legname and Enrico Cherubini. PrPC Controls via Protein Kinase A the Direction of Synaptic Plasticity in the Immature Hippocampus. Neurobiology of Disease 33, 2973–2983 (2013)