Una nota de prensa de la Universidad de Duke informa del descubrimiento de un nuevo sistema de antibiorresistencia en los hongos de la especie Mucor circinelloides que, según explica esta nota, podría servir como punto de partida para desarrollar nuevas estrategias de tratamiento para combatir hongos, bacterias e incluso virus que son resistentes a diversos antimicrobianos. El descubrimiento es el resultado de un proyecto conjunto de la Universidad de Murcia (España) y la de Duke (Estados Unidos).
Los hongos del género Mucor producen abortos en yeguas y vacas, así como la cigomicosis del cerdo vietnamita, además de infecciones en otras especies animales no domésticas. En las personas, explica uno de los participantes en la investigación el catedrático de Genética de la Universidad de Murcia, Santiago Torres: “Normalmente este hongo sólo produce alteraciones en la piel, pero si llega a propagarse al interior del cuerpo, el índice de mortalidad en las personas inmudeprimidas, diabéticas o seropositivas puede llegar hasta el 90 %”, en una noticia de Agencia SINC.
Generalmente, cuando un microorganismo adquiere resistencia a cierto medicamente lo hace mediante mutaciones de su ADN, que son en principio permanentes. Estas mutaciones le permiten resistir la acción de ese fármaco pero pueden conllevar desventajas que, al ser permanentes, pueden llegar a perjudicar al microorganimo. Pero el nuevo mecanismo descubierto, que se denomina “epimutación”, consiste en el silenciamiento de genes mediado por ARN, de forma no permanente. Así, el microorganismo adquiere la resistencia pero sin las desventajas permanentes que podría significar una mutación en su genoma.
De esta forma, los microorganismos son más flexibles y pueden desilenciar los genes cuando el factor que ha determinado su silenciamiento (en este caso un tratamiento antibiótico) ha desaparecido.