Según informa una noticia de la Agencia DiCYT, un grupo de investigación de la Universitat Jaume I de Castellón ha patentado un sistema modular de ventilación para cubiertas inclinadas que resuelve el problema de la acumulación de calor por la radiación solar bajo los tejados sin necesidad de recurrir a instalaciones de refrigeración. Este nuevo sistema supone una solución pasiva y energéticamente eficiente para el acondicionamiento térmico de edificios.
Aunque la idea para desarrollar este sistema de ventilación surgió a partir de la necesidad de conseguir que los áticos de las viviendas se mantuviesen a temperaturas razonables en verano, bajo la radiación directa del sol en el tejado, el responsable del proyecto Juan Antonio García Esparza ha aclarado a Albéitar PV que “el módulo podría utilizarse en lugares de producción animal. En una cubierta inclinada como otra cualquiera”.
García Esparza explica que el módulo favorece la disipación del calor en cubiertas de teja cerámica, porque es en ellas donde se produce una importante acumulación debido a la insolación de la masa que conforma el material constructivo. Además, el investigador de la Universidad Jaume I señala que el sistema que han ideado también funcionaría en locales ganaderos con cubiertas de planchas metálicas, pues estas planchas absorben gran cantidad de radiación solar.
Eficiencia económica del nuevo sistema de ventilación
La solución desarrollada permite disipar el calor mediante la ventilación natural exterior a través de unos módulos cuya fabricación e instalación resulta sencilla, económica y acorde a la legislación en materia de eficiencia económica.
El módulo patentado comprende un armazón con una configuración alargada y plana y con una sección en forma de “U” invertida. Dicho armazón está destinado a unirse a los elementos estructurales de la cubierta de forma que se crea un espacio entre una cara superior del armazón y dicha cubierta a través del que fluye el aire, posibilitando las ventajas de refrigeración. “Para revestir toda la cubierta se emplea una pluralidad de armazones que se encastran entre sí. Además se dispone de unos aleros, con varias aberturas, también destinadas a permitir el paso del aire, para lo que existen igualmente unas aberturas en la zona de la cumbrera de la cubierta”, explica García Esparza. Este sistema permite que el aire entre a través de las aberturas de los aleros, recorra la cubierta a través del espacio libre que se crea con los armazones y salga por las aberturas de las piezas de cumbrera. Esta libre circulación de aire por la cubierta refrigera el habitáculo del edificio que queda directamente bajo cubierta, mejorando así las condiciones de confort de estos espacios.
Una vez desarrollada y patentada la tecnología, desde el grupo de Tecnología, Calidad y Sostenibilidad en la Edificación han iniciado la fase de búsqueda de socios industriales a los que transferir la tecnología para su comercialización.