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Estados afectivos negativos como pueden ser la ansiedad y la depresión representan un riesgo para el bienestar animal; sin embargo, las pruebas prácticas para evaluar estos estados en animales, sobre todo en los de producción, son muy limitadas.

Antecedentes

Previamente, se había desarrollado y validado una prueba de sesgo de atención como posible herramienta para analizar los estados de ansiedad como índice de bienestar animal en ovejas. Los resultados de dicho estudio mostraron que las ovejas más ansiosas prestaban mayor atención a una amenaza (en ese caso un perro) y estaban más atentas que los animales del grupo control.

En medicina humana se ha demostrado que los individuos que presentan un estado de ansiedad prestan más atención a la información amenazadora que los individuos no ansiosos, lo que se conoce como sesgo de atención. Esos estudios sugieren que los sesgos de atención también se producen en individuos deprimidos, con observaciones de sesgos hacia amenazas y una reducción de la atención a los estímulos positivos.

Dados estos hallazgos, los investigadores realizaron un estudio* en el cual plantearon la hipótesis de que una prueba de sesgo de atención para ovejas se podría usar para evaluar los estados de depresión.

Material y métodos

En este experimento se utilizaron cincuenta ovejas merinas no lactantes ni gestantes, de 18 a 20 meses de edad y con un peso corporal promedio de 37,9 ± 2,8 kg. Las ovejas se habían sometido a un manejo de rutina antes del estudio y, por lo tanto, estaban familiarizadas con la presencia de humanos, pero no tenían experiencia con la prueba de sesgo de atención ni con las fotografías.

Se realizaron dos predicciones:

• Que las ovejas merinas en estados depresivos (para-clorofenilalanina) y ansiosos (m-clorofenilpiperazina), inducidos farmacológicamente, mostrarían mayor atención hacia una amenaza que los animales control (solución salina).
• Que las ovejas deprimidas mostrarían un interés relativamente menor ante un estímulo positivo (fotografía de un conespecífico).

Para la segunda predicción se seleccionó un conespecífico como estímulo positivo alternativo ya que las ovejas son animales sociales; sin embargo, la adición de otro animal vivo podría nuevamente introducir variaciones no deseadas en la prueba.

Resultados y discusión

Durante las pruebas, los resultados mostraron que:

• Las ovejas deprimidas prestaron más atención a la amenaza y menos a la fotografía que los animales del grupo control, tal y como se había predicho (análisis de la varianza, p <0,05; n = 16 por tratamiento).
• Las ovejas con ansiedad, curiosamente, mostraron un sesgo de atención en la dirección opuesta a las deprimidas. Así, prestaron más atención a la fotografía y menos a la amenaza que los animales del grupo control (p <0,05).
• Tanto las ovejas ansiosas como las deprimidas estuvieron más alerta que los animales control (p = 0,002).

Estos resultados sugieren que la prueba de sesgo de atención se puede usar para medir y diferenciar los estados de depresión y ansiedad en el ganado como posible medida del nivel de bienestar animal.

Conclusión

La naturaleza bidireccional del sesgo de atención identificado entre los tratamientos resalta la importancia de medir múltiples comportamientos en la prueba y considerar el contexto en el que se aplica dicha prueba.

En conclusión, este tipo de pruebas podrían permitir una caracterización más clara del estado afectivo de un animal, como un aspecto de su bienestar.

*Monk J.E., Belson S., Ian G. Colditz I.G. and Lee C. Attention Bias Test Differentiates Anxiety and Depression in Sheep. Front Behav Neurosci. 2018; 12: 246. Published online 2018 Oct 23. doi: 10.3389/fnbeh.2018.00246.