Investigadores del Instituto Agroalimentario de Aragón (IA2) de la Universidad de Zaragoza y del CITA del Gobierno de Aragón, trabajan para desarrollar un test rápido que permita detectar residuos de antibióticos en animales y productos cárnicos, dentro del proyecto europeo Testacos.
El objetivo de este proyecto, de tres años de duración, es diseñar un sistema analítico integrado de amplio espectro que ponga al alcance de toda la cadena alimentaria un autocontrol sencillo de los residuos de antibióticos y sulfamidas, tanto en animal vivo como en carne comercializada.
El proyecto está cofinanciado al 65 % por el Fondo Europeo de Desarrollo Regional (Feder) a través del Programa Interreg V-A España-Francia-Andorra (Poctefa 2014-2020). El objetivo del Poctefa es reforzar la integración económica y social de la zona fronteriza España-Francia-Andorra.
Este proyecto pretende apoyar al sector de producción de carne de la región Poctefa proporcionándole nuevas herramientas analíticas que permitan mejorar la calidad de la carne que se comercializa y su competitividad.
Durante el primer año se avanzó en la creación del banco de muestras contaminadas (con diferentes antibióticos a diferentes concentraciones) que ya cuenta con más de 5.000 muestras de músculo, sangre y orina, según Pagán.
Estas muestras servirán de patrón para el segundo gran objetivo del proyecto, que es el desarrollo de nuevas herramientas que permitirán realizar un control de la presencia de residuos de antibióticos en animales vivos.
Tras la última reunión del grupo, Rafael Pagán, director del IA2, comentó que la novedad principal del test propuesto es que permite detectar los antibióticos en el animal vivo, evitando su sacrificio en caso de que esté contaminado, y mejora las indicaciones para productos cárnicos de la prueba existente.
Esta prueba constará de un test biológico que será de amplio espectro y de un test químico específico para la detección de quinolonas.
A finales de 2019, el proyecto dará el tercer y último paso. Se trata de estudiar la presencia de residuos de antibióticos en 4.800 muestras de carne comercializada en los supermercados de Toulouse, Perpiñán, Bilbao, Logroño y Zaragoza.
Como resultado final, se elaborarán recomendaciones que permitirán mejorar el sistema de control de calidad en la producción ganadera de la región.