Tal y como publica EfeAgro, hace unos días el ministro francés de Agricultura, Didier Guillaume, confirmó la creación de un “vacío sanitario” en una franja de la frontera con Bélgica en la que se van a matar todos los jabalíes para impedir la llegada de la peste porcina africana (PPA) desde el país vecino. “Francia está indemne de peste porcina”, subrayó Guillaume en una entrevista al canal BFMTV, pero su presencia en Bélgica “es un asunto gravísimo” por la posibilidad de que la enfermedad atraviese la frontera.
El Ministère de l’Agriculture et de l’Alimentation publica en su página web que estas nuevas medidas, anunciadas por el Ministro, fueron aclaradas por Loïc Evain, Director General Adjunto de Alimentación y Jefe de los Veterinarios Oficiales en Francia, y Loïc Gouëllo, nombrado director de crisis. Loïc Evain recordó la determinación de los servicios estatales, al más alto nivel, de hacer todo lo posible para preservar la situación de Francia como país libre de PPA.
El Gobierno ha activado un mecanismo de crisis tanto a nivel nacional como local en la Région Grand-Est que incluye a representantes del sector porcino francés, cazadores y profesionales forestales, expertos científicos y funcionarios gubernamentales.
Hay que recordar que el pasado 8 de enero fueron abatidos en Bélgica dos jabalíes infectados con la PPA a poco más de 1 km de la frontera con Francia. Por otro lado, un estudio reciente realizado en Dinamarca confirmó una nueva posible vía de infección en el porcino: la ingestión de moscas infectadas por la PPA.
El perímetro de la "zona blanca" se concretó teniendo en cuenta la opinión de los expertos científicos de la Agence nationale de sécurité sanitaire de l’alimentation, de l’environnement et du travail (Anses). Esta zona está ubicada cerca de las áreas donde se encontraron los últimos casos de PPA en Bélgica y recorre los departamentos de Meuse y Ardennes, cubriendo un área de 141 km2 en la que abarca a 24 municipios.
Además, las autoridades sanitarias han especificado que la valla tendrá una altura de aproximadamente 1,5 m y estará enterrada en el suelo, se extenderá a lo largo de 43,3 km. Esta misma semana ha comenzado la colocación de la cerca por la zona de mayor riesgo.
En la denominada “zona blanca” los cazadores y los agentes del Office National de la Chasse et de la Faune Sauvage y del Office National des Forêts van a organizar patrullas para matar a todos los jabalíes que puedan encontrar y localizar posibles cadáveres. El estado subvencionará a los cazadores con 100 euros por animal sacrificado, jabalíes que serán geolocalizados y transportados de acuerdo con las normas de bioseguridad hasta el punto de recogida de cadáveres más cercano. Además, se ha prohibido la realización de cualquier actividad forestal (económica y de ocio) en la zona.
Paralelamente, se pondrá en marcha un procedimiento de vigilancia por parte de las autoridades en las granjas de producción de cerdo blanco para garantizar un nivel de bioseguridad máxima, según un comunicado del departamento de Agricultura.
Finalmente, el pasado viernes 18 de enero el Gobierno galo publicó en el Journal Officiel de la République Français una “Orden que modifica la Orden de 19 de octubre de 2018 sobre las medidas de prevención y vigilancia que deben aplicarse en el campo de las actividades de caza y silvicultura y en las granjas de cerdos en el área de intervención tras el descubrimiento de casos de PPA en jabalíes en Bélgica” y que se puede descargar en este enlace.