Luanda, inicialmente pensada para 500.000 habitantes, en su momento acomodó a numerosos refugiados angoleños durante la guerra civil (1975-2002). En la actualidad, alberga a cinco millones de personas, las cuales se encuentran viviendo en terribles condiciones de pobreza e insalubridad. A esto se le suma un gran cantidad de perros vagabundos quienes son propensos a ser portadores y transmitir el virus de la rabia a personas.
La rabia es transmitida por las mordeduras o arañazos de un animal a otro, o al hombre de animales infectados. Esta enfermedad que ataca al sistema nervioso es curable si tratada a tiempo. Se manifiesta a partir de fiebre, espasmos, hidrofobia y parálisis.
Se conocen varios casos de muertes por la misma razón en otras provincias del país. El gobierno angolés no ha procedido aún a un cómputo global pero por lo menos ha lanzado una campaña nacional de vacunación e información.