El veterinario Alister Rodgers falleció el miércoles día 2 de septiembre. Rodgers permanecía ingresado en el Princess Alexandra Hospital bajo un coma inducido tras infectarse con el virus Hendra, contagiado por uno de los caballos que atendía en la explotación de Cawarral (Queensland, Australia) en la que se declaró un brote durante este verano. La última persona que había muerto como consecuencia de este virus fue otro veterinario, Ben Cunneen, de Brisbane (Australia), hace casi un año.
Los expertos han advertido del peligro que corren los veterinarios ante esta infección, comparándola con el SIDA para los médicos. Hay que recordar que el virus Hendra sólo se ha detectado hasta el momento en Australia, lugar donde tiene su portador natural, el murciélago frugívoro.
Por el momento, sólo hay siete personas que hayan contraído el virus, todas ellas tras haber estado en contacto con los caballos enfermos de Cawarral o sus fluidos corporales.