Un grupo de veterinarios de la Universidad de Liverpool llevó a cabo una investigación sobre la etiología y la evolución de los perros con crisis de inicio juvenil. Para ello estudiaron 136 perros cuyo primer ataque ocurrió antes de la edad de un año. Un total de 102 perros fueron diagnosticados con epilepsia idiopática (EI), 23 con epilepsia sintomática (ES), 9 con ataques reactivos (AR) y dos con epilepsia sintomática probable (ESp). El resultado se conoció en 114 perros: el 37% murieron o fueron sacrificados como consecuencia de las convulsiones. El tiempo medio de supervivencia de esta población de perros fue de 7,1 años. Los factores que se asociaron significativamente con la supervivencia incluyeron el diagnóstico de la ES y el número de fármacos antiepilépticos (FAE) que se utilizaron antes de la investigación. El uso de un FAE antes de la investigación y el diagnóstico de la ES se asociaron con un resultado negativo, mientras que no recibir FAE antes de la derivación se asoció con una mayor supervivencia.
Para los perros con EI, el tiempo de supervivencia se redujo si el perro era un Border Collie o tenía un historial de estado epiléptico; no recibir un FAE antes de la derivación al grupo de EI se asoció con un resultado positivo. El estatus “libre de crisis” lo alcanzaron el 22% de los perros diagnosticados con EI.
Los investigadores concluyeron que, si bien los tiempos de supervivencia eran más largos que los indicados en estudios previos en la epilepsia canina, no se observaron en la población canina juvenil tasas de remisión similares a las indicadas en la epilepsia infantil (donde está documentada una tasa de remisión del 70%).
Arrol L, Penderis J, Garosi L, Cripps P, Gutierrez-Quintana R, Gonçalves R. Aetiology and long-term outcome of juvenile epilepsy in 136 dogs. Vet Rec. 2012 Jan 21.