Vecmap, un proyecto de la Agencia Espacial Europea (ESA), está probando técnicas para determinar con precisión la distribución de los mosquitos en Europa, en especial la de aquellas especies capaces de transmitir enfermedades.
Las enfermedades transmitidas por los mosquitos y las garrapatas se están convirtiendo en un problema para la salud pública en Europa, ya que resulta muy difícil predecir dónde brotarán o cómo se extenderán. Las condiciones, el lugar y la época de la eclosión de las larvas de mosquito varían mucho entre las distintas especies.
Vecmap proporciona una plataforma que simplifica el análisis de la distribución de los mosquitos, identificando hábitats críticos a partir de los datos recogidos sobre el terreno y generando mapas de riesgos que atienden a las necesidades de una gran variedad de usuarios.
Esta iniciativa combina los datos sobre el tipo de vegetación, la temperatura y la humedad del suelo, que los inspectores miden sobre el terreno con la información recogida por los satélites de observación terrestres, y abarca tanto la programación como sus servicios de apoyo.
Fichados con el móvil
Los inspectores introducen los datos que recogen sobre el terreno en un teléfono móvil, que marca su posición con la señal de los satélites de navegación y los envía a una base de datos centralizada. Esta base de datos permite a los investigadores acceder a una gran variedad de gráficas y hacer búsquedas interactivas en función de sus necesidades.
La consultora belga Avia-GIS recibió el encargo de coordinar el programa de erradicación del mosquito Ochlerotatus japonicus en Bélgica, después de que las autoridades belgas estudiasen un análisis de riesgos preparado por el Instituto Científico de Salud Pública en el que colaboraron expertos del proyecto Modirisk, que estudia la biodiversidad de estos insectos.
Avia-Gis está trabajando con la ESA en el desarrollo de Vecmap y utilizará este sistema para cumplir con los requisitos impuestos por el programa belga para la erradicación del Ochlerotatus japonicus. El estudio de la distribución de este mosquito continuará hasta el final de temporada y podría reanudarse en marzo de 2013.