El gusano del corazón, Dirofilaria immitis, es endémico en Portugal. Ya se han llevado a cabo diversos estudios sobre la prevalencia del parásito en la población canina, pero por primera vez se ha publicado un estudio* de prevalencia en gatos. Un equipo formado por científicos portugueses y españoles han encontrado que la seroprevalencia media de D. immitis en gatos en el centro y norte de Portugal es del 15 %, frente a un 2,1 % en los perros.
Los datos obtenidos de las serologías realizadas a 434 gatos indican que los machos son más prevalentes (17,9 %) que las hembras (10,5 %). En cuanto a la edad de los animales, la prevalencia es mayor en los que tienen seis años o más (19,8 %). Las mayores diferencias las marcan los hábitos del animal: los que viven en el exterior alcanzan una prevalencia del 25,4 %, mientras que los gatos caseros se quedan en el 11,2 % y los caseros con acceso al exterior (hasta la mitad del tiempo fuera de casa) están en el 15,2 %.
El mayor problema para conseguir un diagnóstico serológico preciso de D. immitis en gatos es que la carga parasitaria suele ser baja, lo cual suele conducir a test de antígeno negativos. También supone un handicap que la enfermedad en los gatos la produzcan formas inmmaduras del parásito. Por otra parte, los felinos parecen tolerar mejor la infección que los perros, con síntomas clínicos muy leves o incluso inexistentes.
Los perros y gatos que muestran síntomas respiratorios tienen prevalencias mayores que los asintomáticos: un 17 y un 24,4 %, respectivamente. Por su parte, la mitad de los gatos con síntomas digestivos son seropositivos.
Los resultados de este estudio indican la necesidad de incluir dirofilariosis en los diagnósticos diferenciales cuando los pacientes caninos y felinos muestren síntomas respiratorios o digestivos, indican los autores en sus conclusiones. También aportan la hipótesis de que la mayor prevalencia en los gatos se deba a que mientras que los perros reciben medicación preventiva de forma habitual los gatos no, lo que los deja a merced de los mosquitos que transmiten el parásito. Así mismo, señalan que todo el estudio se ha llevado a cabo detectando anticuerpos en el suero: de esta forma, los resultados indican que el paciente ha estado expuesto al parásito pero no necesariamente que esté infectado en el momento de la serología.
*Vieira L, Silvestre-Ferreira AC, Fontes-Sousa AP, Balreira AC, Morchón R, Carretón E, Vilhena H, Simón F, Montoya-Alonso JA. Seroprevalence of heartworm (Dirofilaria immitis) in feline and canine hosts from central and northern Portugal. J Helminthol. 2014 May 14:1-5.