El área de I+D de Affinity ha llevado a cabo un estudio en el que se concluye que colocar más bebederos en el hogar fomenta que los gatos beban agua más a menudo y durante todo el día. Según este trabajo, el gato puede llegar a beber un 15 % más gracias a esta sencilla medida. Por las características naturales de su orina, muy concentrada, el gato tiene tendencia a generar piedras en las vías urinarias e incluso a provocar su obstrucción. De ahí que la hidratación sea clave en la prevención de dichos problemas de salud. Un mayor consumo de agua diluye esta concentración y reduce el riesgo de que se precipiten sustancias que acaben formando cálculos.