La Organización Colegial Veterinaria (OCV) reclama “una inversión adecuada en medicina veterinaria y en estrategias de prevención”, ya que es la única forma “de reducir el riesgo de futuras pandemias, que hoy es elevado, si tenemos en cuenta que el 60 % de las enfermedades infecciosas conocidas y hasta el 75 % de las enfermedades infecciosas emergentes son de origen animal”.
En la misma línea, el máximo órgano representativo de los veterinarios españoles insiste en que “la salud pública y la economía global dependen de nuestra capacidad para prevenir enfermedades zoonóticas y evitar su transmisión a las personas, puesto que las zoonosis tienen un impacto económico significativo, que afecta a la salud global, la agricultura, el turismo o el comercio internacional”, y recuerda que “la prevención en el origen es más efectiva y menos costosa que el tratamiento”.
Con motivo del Día Mundial de la Salud, que se celebra el domingo 7 de abril, la OCV subraya que "la salud es mucho más que la ausencia de enfermedad". Por ello, incide en la necesidad apremiante de reevaluar nuestro Sistema Nacional de Salud para que no solo se centre en la asistencia sanitaria, sino también en la prevención, investigación, educación y en un enfoque más holístico que aborde las pandemias y epidemias de manera efectiva.
Enfermedades como el ébola, la rabia, el VIH o la COVID-19 nos han enseñado las consecuencias potencialmente devastadoras de no prestar la atención que merece a la salud animal, ya que se estima que las zoonosis son responsables de aproximadamente 2.500 millones de casos de enfermedad en humanos y 2,7 millones de muertes cada año en todo el mundo.
Así mismo, la OCV señala “la urgencia de adoptar un enfoque proactivo, en lugar de reactivo, en la gestión de la salud pública, donde los veterinarios tenemos un papel importante que desempeñar como sanitarios que somos en todas nuestras vertientes profesionales”.
La Organización se muestra partidaria de “unificar esfuerzos y trabajar desde la aproximación One Health-Una Sola Salud como piedra angular de la salud pública, y fundamental para abordar las complejas interacciones que dan lugar a la emergencia y propagación de agentes patógenos, poniendo en riesgo la salud global”.
La colaboración intersectorial es un elemento clave para la veterinaria española. Trabajar mano a mano con profesionales y autoridades sanitarias de todos los campos, organizaciones no gubernamentales y el sector agroalimentario, entre otros, permitiría una respuesta más efectiva y coordinada ante emergencias sanitarias, además de fortalecer los sistemas de salud nacional e internacional.