El Colegio Oficial de Veterinarios (Colvet) de Cádiz ha aprovechado la celebración del Día Mundial de la Humanidad, que se conmemora el 19 de agosto, para celebrar un desayuno-coloquio donde poner de manifiesto y transmitir a la sociedad la dimensión humanística de la profesión, que desde sus inicios ha tenido un papel fundamental al servicio de la humanidad mejorando la salud, economía y felicidad de las personas.
Tras unas palabras de bienvenida a los asistentes por parte de Cristina Velasco Bernal, presidenta del Colvet Cádiz, se proyectó un vídeo explicativo en el que se resume la labor desde una perspectiva humanística y las actividades de responsabilidad social corporativa llevadas a cabo por el colegio. Tras él, la presidenta intervino para subrayar la labor de los veterinarios, de quienes recordó que “no solo estamos dedicados a curar a los animales, sino que nuestra profesión tiene un impacto profundo en la salud, la economía y la felicidad de las personas. Esta visión integradora y humanística de nuestra labor es esencial para entender la verdadera magnitud de nuestro trabajo”.
La presidenta de Colvet Cádiz concluyó que “debemos sentirnos orgullosos de ser veterinarios. Nuestra labor va más allá de las consultas y las cirugías; somos una parte vital de la sociedad. Al abrazar una visión integradora y humanística de nuestra profesión, reconocemos y honramos el impacto positivo que los veterinarios y veterinarias tenemos en el mundo. Sigamos trabajando con pasión y dedicación, sabiendo que cada una de nuestras acciones contribuye a un futuro más saludable, próspero y feliz para todos”.
Seguidamente intervino Jesús Fernández Pascual, coordinador del área de responsabilidad social corporativa de Colvet Cádiz, dimensión que abordó también desde la perspectiva humanística, poniendo como ejemplo el vínculo de cooperación que comparten con el Banco de Alimentos y sus resultados más destacables: “La dedicación a los animales sin la dimensión humana de la profesión veterinaria no existiría. Los veterinarios queremos estar presentes también en el Día de la Humanidad para crear conciencia de la relevancia de la profesión porque como dijo Pasteur, "la medicina cuida al hombre, la medicina veterinaria cuida a la humanidad”.
Fernández señaló algunos datos relativos a la colaboración con el Banco de Alimentos y la Guardia Civil. Son más de 523 personas beneficiarias de formación en lo que va de programa solidario, y aproximadamente 60.000 kilos de atún rojo que han llegado a centros benéficos, originalmente decomisados por su pesca ilegal por parte de la Guardia Civil.
En esta línea, y como representante de la Guardia Civil, entidad con la que el Colegio de Veterinarios mantiene un convenio de colaboración, Francisco José Limón, jefe accidental del Seprona, recalcó la importancia de la garantía de la trazabilidad del pescado incautado que se dirige al Banco de Alimentos, poniendo en valor la colaboración constante entre las entidades y la importancia del cuidado de la seguridad alimentaria durante todo el proceso para que las personas beneficiarias de estos proyectos de responsabilidad social corporativa consuman el atún requisado en absoluta seguridad.
Jesús Fernández se refirió también al ámbito del programa solidario de visitas de animales de compañía al Hospital Universitario Puerta del Mar, que se empezó a poner en práctica en 2018 a través de un protocolo que garantizara la seguridad de todo el proceso.
El veterinario colegiado Rubén Marqués García, voluntario participante en este programa, aportó su experiencia en primera persona en estas visitas: “Al ser nuestros propios animales de compañía los que protagonizan las visitas, es clave conocer y prever el comportamiento y las reacciones de cada animal a la hora de la aproximación a los pacientes”, destacó. “Suelo clasificar en tres las reacciones de los pacientes: aquellos que ya tienen animales en casa y son o bien pacientes de larga duración o pacientes terminales, son unas reacciones tiernas y positivas porque les suponen el recuerdo a su propio animal. Las personas mayores suelen rescatar recuerdos y experiencias del pasado, suelen asociar la visita a anécdotas positivas. En tercer lugar, el caso de personas jóvenes o que nunca han tenido animales de compañía, en las que se despierta una nueva ilusión e incluso en algunos casos, un deseo de adopción al fin de su estancia en el centro sanitario”.
Continuó el turno de intervenciones Inmaculada Rosado, miembro de la Junta de Gobierno de Colvet Cádiz y responsable del área del programa CER Integral, temática que desarrolló para los presentes como pieza esencial dentro de las llevadas a cabo en el ámbito de la salud pública por el colegio. “Estos programas se vienen realizando en convenio con los ayuntamientos, siendo el de Cádiz pionero y habiéndose sumado muchos otros a través de los años. Este proceso es una carrera de fondo que requiere mucha implicación. Las partes implicadas son ayuntamientos, voluntarios y veterinarios, y nosotros coordinamos la cooperación de cada grupo. Además, agregamos la dimensión formativa, tanto a las instituciones como a voluntarios y a la propia población”.
Rosado destacó también que aunque este protocolo se ha popularizado en los últimos años, es una labor que se lleva haciendo desde hace muchos años y especialmente en la provincia de Cádiz. También recalcó el trabajo que lleva a cabo Colvet Cádiz y destacó la gratuidad del microchip y la vacuna de la rabia.
Mario de la Cueva, miembro también de la Junta de Gobierno de Colvet Cádiz y responsable de las áreas de formación y comunicación, cerró el ciclo de intervenciones abordando la dimensión de la tenencia responsable. “Los propietarios son los verdaderos protagonistas a la hora de garantizar la salud y el bienestar de los animales de compañía, y no solo de perros y gatos, sino también de caballos (especialmente con el ejemplo actual del virus de la fiebre del Nilo), o los propios ganaderos, entre otros. La tenencia responsable no es solo una cuestión de los veterinarios sino en general de los propietarios y, en definitiva, de la humanidad”.