A través de las reuniones mantenidas con las autoridades competentes de las Comunidades Autónomas y con el sector, el Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente ha constatado que el virus no ha afectado a la cabaña ganadera española, a pesar de lo cual, y siguiendo las recomendaciones de la Unión Europea, se ha aumentado la prevención mediante la elaboración de un plan de vigilancia. El virus Schmallenberg, que afecta al ganado vacuno y ovino, ha sido detectado en explotaciones ganaderas de Alemania, Holanda, Bélgica y Reino Unido.
Por otro lado, cabe destacar que es el ganado ovino el más afectado por el virus, probablemente debido a que es más difícil probar la presencia del mismo en terneros. Esto se debe a que el tiempo transcurrido entre la infección con el virus Schmallenberg y el parto es más largo en terneros, disminuyendo la probabilidad de que permanezca en el feto malformado hasta su nacimiento. De este modo, ni en Holanda ni en Alemania, a pesar del nacimiento de muchos terneros con malformaciones, no se ha detectado la presencia del virus en ninguno de ellos.
Finalmente, reiterar que el Centro Europeo de Prevención y Control de Enfermedades no descarta la posibilidad de transmisión zoonótica del virus, por lo que se recomienda extremar las precauciones a los profesionales en contacto con los animales.