Los expertos sentados a la mesa con motivo del debate sobre la rabia de Portal Veterinaria, patrocinado por Boehringer Ingelheim, analizaron a conciencia la zoonosis en una innovadora iniciativa online cuyo audio está disponible sin fecha límite en esta sección de “Los debates de PV”.
Durante el debate sobre la rabia de Portal Veterinaria, patrocinado por Boehringer Ingelheim, los tres ponentes invitados, María García, gerente veterinaria de ATV Clínica Veterinaria (Fraga, Huesca) y presidenta de la Conferencia Empresarial Veterinaria Española (CEVE) en Aragón; Antonio Arenas, presidente del Colegio de Veterinarios de Córdoba y catedrático del área de Sanidad Animal de la Facultad de Veterinaria de la Universidad de Córdoba; y Esperanza Jurado, asesora técnica veterinaria Pet-Vet de Boehringer Ingelheim; analizaron temas de máxima relevancia para el sector.
En la mesa se planteó cuál sería la frecuencia idónea para vacunar frente a la rabia. En este punto, los veterinarios lo tienen claro: “Debería ser anual”, sentenció García. “Esto ayudaría a que el animal fuera revisado regularmente por el veterinario. No debemos olvidar que el perro convive con las personas y que debería estar muy protegido frente a muchas enfermedades. Es el caso de la leptospirosis, que es una zoonosis muy grave y fácilmente prevenible mediante la vacunación. O la equinococosis. Estas dos enfermedades tienen actualmente una incidencia creciente”, aportó Arenas.
Escucha aquí el debate sobre la rabia:
A la clínica veterinaria entran dos tipos de clientes. Dependiendo de su condición, estos actúan de un modo u otro ante la vacunación: “Está quien quiere solo el pack legal, y que posiblemente deje de acudir a la clínica porque conocerá a alguien que le puede vacunar en casa. A estos animales no los podemos revisar, y eso conlleva riesgos para su salud y la de sus propietarios. El cliente concienciado es el interesado en la salud integral de su animal, el que quiere que su animal esté protegido. Es el cliente al que debemos ofrecer formación para que esté al tanto de las necesidades de su animal”, opinó García.
Los veterinarios cuentan con la ayuda de empresas y laboratorios en la lucha frente a la rabia. En este sentido, Boehringer Ingelheim dispone de unas gamas de vacunas amplias y flexibles para perros y gatos cuyo objetivo es ayudar a los clínicos en la lucha contra esta enfermedad en España: “Trabajamos para ofrecer al veterinario clínico el mejor protocolo que se adapte a cada animal de compañía. Disponemos de un porfolio muy amplio frente a la rabia y otras enfermedades. En Boehringer Ingelheim ofrecemos herramientas educativas de ayuda porque somos conscientes de que el pilar más importante para luchar contra la rabia es la educación y concienciar a los propietarios de la importancia de la prevención gracias a la vacunación. Proporcionamos a los veterinarios formación y materiales educativos dirigidos al propietario. Además, como cada vez estamos más inmersos en el mundo digital, elaboramos materiales de educación y concienciación para las redes sociales. También ofrecemos un servicio de asesoría al veterinario”, expuso Jurado.
Lograr un protocolo vacunal común para toda España es el objetivo compartido por veterinarios, colegios e industria. Es un camino lleno de trabas, pero que podría ayudar decisivamente en la prevención de la rabia. “Los veterinarios tenemos mucho que aportar”, destacó García. “La Veterinaria está dentro del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación (MAPA), pero realmente estamos hablando de un problema de salud pública, que es competencia de Sanidad. Los veterinarios somos considerados sanitarios por ley, pero no estamos dentro del sistema sanitario. Es una de nuestras reivindicaciones”, añadió María García.
La situación es compleja, dado que el MAPA no tiene potestad para hablar de salud porque es decisión de cada comunidad autónoma. “En lo que respecta al trabajo de prevención, el Gobierno central tiene poco que decir porque se ha trasferido esa competencia. Y como cada comunidad autónoma tiene libertad para decidir, es complicado lograr esa unificación de criterios”, aportó el presidente del Colegio de Veterinarios de Córdoba. “Además, al ser un país indemne de rabia, cada uno decide qué hacer. Otra cosa es el control, que sí debe existir en las fronteras. Sin embargo es un control suave y complicado, ya que pueden entrar animales de países con rabia endémica. Así, desde el punto de vista veterinario estamos en una posición de indefensión”, apostilló Arenas.
Durante el debate se analizó la importancia del riesgo de transmisión de rabia de las colonias de gatos callejeros, murciélagos y otras especies como los hurones, el papel de los animales importados de otros países, de los planes de contingencia, del objetivo de la OMS de “cero muertes humanas por rabia urbana en 2030”, y qué pueden hacer colegios, clínicos y laboratorios para contribuir al logro de este ambicioso objetivo, y de la necesidad de un aprendizaje y reciclaje constantes sobre rabia: “El veterinario necesita formación continua. Su área de conocimientos es muy amplia, y estos además avanzan cada vez más rápido. Por eso desde los colegios se incide mucho en la formación”, expuso Arenas.
Antonio Arenas terminó su intervención realizando una interesante recomendación: “Debemos apostar por el esquema básico de vacunación. Este incluye la primovacunación frente a rabia a los 3 o 4 meses de edad con una vacuna monovalente, seguida al mes de otra vacuna monovalente y después ya ir vacunando cada año con vacunas polivalentes. Esto nos va a permitir mantener un estatus inmunitario ante otros procesos infecciosos de nuestros animales, zoonóticos o no”, terminó Arenas.
Por su parte, María García concluyó con un deseo: “Dejar de tener clientes de pack legal y tener clientes concienciados que den importancia a la prevención. Los animales necesitan más de una revisión anual porque debemos hacer chequeos periódicos, controles antiparasitarios, etc. Para nosotros es primordial realizar un seguimiento continuado del animal, tanto ante la rabia como ante todas las enfermedades”.
Esperanza Jurado explicó que las cuestiones más frecuentes que recibe el servicio técnico de Boehringer Ingelheim sobre la rabia hacen referencia a las fichas técnicas de los productos y al manejo específico de la vacunación de un animal en particular: “Cada consulta es personalizada y analizamos con el veterinario cada caso para proporcionar la mejor recomendación”, destacó Jurado, quien recordó que “tenemos un amplio horario de disponibilidad, el veterinario puede contactar con nosotros desde el teléfono o el email de atención al cliente, con el servicio técnico directamente o a través de su delegado de zona para resolución de dudas o consultas”.