Con más de 130 alumnos y tres ediciones celebradas, el Curso de Gestión de Clínicas Veterinarias organizado por VMA ya está preparando su próxima edición, que comenzará el próximo 10 de octubre. Y además lo hace con las buenas opiniones que han llegado de quienes ya lo han hecho. “Estamos muy contentos por lo que nos han dicho antiguos alumnos del curso”, afirma Miguel Ángel Díaz Sánchez, uno de los dos encargados de impartir el curso. “Han valorado que el curso ofrece contenidos prácticos y de aplicación inmediata”, añade. El segundo docente del curso, Pere Mercader, también apunta “algo que habla bien del curso y nos anima a seguir: ha habido gente que lo ha hecho, y luego ha traído a otros compañeros para que lo hicieran también”.
El curso se centra en gestión de clínicas veterinarias, pero el perfil del alumnado es muy variado, e incluso “sorprendente”. En él tienen por supuesto cabida propietarios y gerentes de clínicas, pero también otros profesionales “que quieren mejorar sus conocimientos del sector”. También es muy diversa su procedencia geográfica, con alumnos de toda España y Latinoamérica, así como de otros países de habla no hispana, como Italia o Portugal. “Edición tras edición nos sorprende la diversidad”, comenta Miguel Ángel Díaz.
El curso, que tiene una duración de diez semanas, se estructura en ocho módulos con dos partes: a Miguel Ángel Díaz le corresponde impartir las materias relacionadas con las soft skills, como temas de liderazgo, comunicación o relaciones de personas, mientras que Pere Mercader se hace cargo de la parte “más numérica” y de cuestiones de gestión económica.
Respecto a los formatos, se combinan los contenidos online con ejercicios y actividades para poner en práctica los conocimientos adquiridos. “Pero a lo que le tenemos más cariño”, señala Pere Mercader, “es a los webinars semanales que hacemos, una sesión conjunta con los alumnos en directo, donde hemos llegado a tener conectados al 85 % de los inscritos”. Los foros de discusión son una fuente de experiencias y conocimiento muy rica, así como las intervenciones de veterinarios y exalumnos invitados para que cuenten sus experiencias, de donde surge un “calor digital” muy provechoso, como señala Miguel Ángel Díaz.
Tanto Pere Mercader como Miguel Ángel Díaz insisten en que este curso está hecho “por gente que tiene miles de horas de experiencia en las trincheras de la profesión”, y esa es una de las diferencias con un MBA al uso. “Un MBA te da una visión general, que es algo que está muy bien”, explica Pere Mercader, “pero nuestro público no nos pide eso: son personas megaocupadas que quieren herramientas que sean rigurosas pero para ponerlas en uso en la clínica”. Miguel Ángel Díaz lo define así: “Nuestro curso es una navaja suiza multiusos pensada para una clínica, llena de herramientas para situaciones y retos muy concretos, y que ya están probadas”.