Una razón común por la que los gatos visitan la clínica veterinaria es porque han dejado de comer, son reacios a comer o comen menos de lo normal. La inapetencia o pérdida de apetito es un signo común de enfermedad o dolor en los gatos que necesitan atención veterinaria.
La pérdida de apetito también es común en gatos que han sido ingresados en el hospital o que han tenido una cirugía reciente. En todos los casos, el veterinario debe asegurarse de el gato reciba la atención y la nutrición necesarias para recuperar la buena salud. En algunos casos, el equipo veterinario puede considerar la colocación de una sonda de alimentación. Esto puede agilizar la recuperación y permitir que los gatos reciban antes el alta, pero puede ser intimidante para los propietarios y cuidadores que nunca antes han visto o usado una.
Para ayudar con esto y garantizar que los gatos inapetentes reciban la mejor nutrición posible, la Sociedad Internacional de Medicina Felina (ISFM) ha lanzado un conjunto de recursos para profesionales veterinarios y para ayudar a los cuidadores de gatos.
En las dos nuevas pautas para cuidadores de gatos sobre la inapetencia y las sondas de alimentación también se incluye un video paso a paso que muestra cómo usar una sonda de alimentación.
Con el mensaje "¡No esperes! En vez de esperar que el gato coma mañana, actúe hoy y mejore los resultados de los pacientes", la ISFM quiere que los veterinarios tomen conciencia de la importancia de abordar este problema de forma temprana para mejorar el pronóstico de muchos gatos inapetentes.