La Asociación de Veterinarios Españoles Especialistas en Pequeños Animales (AVEPA), en colaboración con la Universidad Autónoma de Barcelona y el apoyo de Elanco y Vets&Clinics by Advance, puso en marcha el proyecto Vetbonds con el objetivo de acercar el conocimiento científico y el asesoramiento práctico a las personas sobre el vínculo que se establece entre las personas y los animales, así como en el ámbito de la profesión veterinaria.
Este proyecto incluye diversas iniciativas, entre ellas el Proyecto Compromiso de Vetbonds, que busca conocer cada vez más el vínculo que se establece entre las personas y sus animales de compañía, con el propósito de ofrecerles el mejor servicio posible y ayudar a enriquecer y prolongar su relación.
El proyecto Vetbonds tiene un enfoque muy valioso, ya que busca mejorar la relación entre las personas y sus animales de compañía, además de ofrecer un mejor servicio en el ámbito de la veterinaria. La difusión, formación e investigación que lleva a cabo este proyecto pueden tener un impacto positivo en la profesión veterinaria y en la sociedad en general, al promover una mayor conciencia y conocimiento sobre la importancia de los animales de compañía en nuestras vidas y en la sociedad.
El Proyecto Compromiso ha tenido como objetivo explorar y conocer mejor las relaciones que se establecen entre perros, gatos y personas. El estudio ha consistido en difundir un cuestionario compuesto por distintas escalas entre personas que conviven con animales y ha contado con la participación de cerca de 1.000 familias. La colaboración entre Vetbonds, clínicas y familias ha sido clave para poder llegar a los resultados.
1. Los veterinarios y los ATV debemos preocuparnos por entender y proteger el vínculo que se establece entre nuestros clientes y nuestros pacientes por tres motivos principales:
2. Las personas con un mayor vínculo emocional con su animal de compañía están más predispuestas a acudir al veterinario, tanto por una enfermedad como para realizar intervenciones de medicina preventiva.
3. Las personas con un vínculo emocional más intenso con su animal tenderán a mostrar una mayor adherencia, una menor sensibilidad al precio del tratamiento, una mayor resistencia a la eutanasia humanitaria y una reacción más intensa de duelo.