En una operación conjunta liderada por el Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) de la Guardia Civil y en estrecha coordinación con la Fiscalía de Medio Ambiente de Málaga, se ha desplegado una labor exhaustiva para combatir el maltrato y abandono de animales domésticos en la provincia malagueña. Esta iniciativa, denominada "Colaphus", ha resultado en el rescate de 111 animales que se encontraban en condiciones deplorables en varios municipios.
Los esfuerzos de inspección realizados por los investigadores del Seprona abarcaron un total de 236 intervenciones, incluyendo la evaluación de perreras privadas, explotaciones ganaderas, núcleos zoológicos y refugios de animales. Durante este proceso, se han identificado más de 500 infracciones administrativas, destacando problemas relacionados con el bienestar animal, la falta de adecuación de los alojamientos, la carencia de alimentación y agua, así como deficiencias en la higiene y la asistencia veterinaria.
Entre las preocupantes situaciones encontradas, se han registrado casos de animales enfermos sin recibir atención médica adecuada, mutilaciones injustificadas y animales abandonados en condiciones extremas, incluso en medio de condiciones climáticas adversas como olas de calor. Estos hallazgos han generado una profunda alarma entre las autoridades y la comunidad veterinaria local.
Como resultado de esta operación, 34 personas están siendo investigadas por su presunta implicación en delitos de maltrato y abandono animal. Los animales rescatados han sido entregados a asociaciones y protectoras de animales bajo la supervisión de las autoridades pertinentes. Solo en los casos menos graves, los animales permanecen bajo la custodia de sus propietarios, con la supervisión de las autoridades competentes.
El Colegio de Veterinarios de Málaga ha brindado un apoyo crucial durante todo el proceso, al igual que algunas asociaciones protectoras de animales y veterinarios de la Consejería de Agricultura, Pesca, Agua y Desarrollo Rural de la Junta de Andalucía en Málaga.
Esta operación subraya la importancia de la colaboración entre las fuerzas del orden, las autoridades competentes y la comunidad veterinaria en la protección y el bienestar de los animales. Asimismo, destaca la urgente necesidad de promover una cultura de respeto y responsabilidad hacia los animales.