Un análisis de costes sirve para calcular el minuto veterinario, que a su vez, sirve para calcular los precios. Vamos a explicar un método abreviado para tener una idea de cuál es el coste de nuestros servicios.
El análisis de costes no da los precios. La decisión última del precio que vamos a cobrar por un servicio viene dada por el mercado y nuestro posicionamiento. Pero sí que nos permite saber cuál es el descuento máximo que podemos aplicar.
Para realizar un análisis de costes necesitamos sabes los gastos de la empresa, en particular los gastos de personal y los fijos o estructurales. Después debemos conocer una de estas dos cosas: el número de consultas o de vacunas que usamos o que aparecen en nuestros sistemas del año anterior, o el número de consultas o vacunas que queremos para el año siguiente.
Debemos además, tener un objetivo claro de ingresos por servicios, así repercutiremos de forma más o menos exacta los gastos sobre el número de servicios. Con estos datos hacemos una fórmula sencilla:
Costes (personal+estructural) x porcentaje de ingresos por servicios/número de consultas y vacunas
Esto nos dará el coste por consulta. Si sabemos la duración de la consulta dividimos el coste por el tiempo que dura la consulta y tendremos el coste de un minuto veterinario, que es el que usaremos para el cálculo del resto de servicios.