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La artritis, también conocida como enfermedad degenerativa de las articulaciones, se refiere generalmente a la lesión por desgaste de las articulaciones que ocurre con el tiempo. Los tipos menos comunes de artritis son la artritis séptica, causada por infecciones, y la artritis inmunomediada, causada por enfermedades como la reumatoide y raras reacciones a medicamentos o vacunas.

En casa, los gatos con artritis limitan su actividad para evitar movimientos que les producen dolor, como subir y bajar escalones o saltar de camas altas. Pueden parecer "malhumorados" con los niños u otras mascotas, y pueden ser percibidos como "perezosos" por pasar mucho tiempo tumbados. Durante el examen físico, se puede observar pérdida muscular en los hombros y los muslos. Los gatos también pueden mostrar un rango de movimiento limitado en los codos, la cadera y las rodillas, y reaccionar dolorosamente cuando se les baja sobre las extremidades afectadas. En las radiografías, los diferentes tipos de artritis tienen apariencias distintas. Los factores de riesgo para la artritis incluyen la desungulación, la obesidad y las lesiones previas.

Los tres objetivos del tratamiento

Tenemos tres objetivos principales con el tratamiento: controlar el dolor, restaurar la función articular y retrasar la progresión de la degeneración articular. El dolor en la artritis proviene de microdesgarros en la cápsula articular y el cartílago articular. El factor de crecimiento nervioso es un mensajero químico en el cuerpo que activa el mensaje de dolor en los nervios.

Tratamientos

Alimentación para optimizar el peso y la composición corporal

El exceso de grasa es una carga para las articulaciones afectadas, por lo que podemos ver una gran mejora en la calidad de vida cuando se controla la alimentación para que el paciente esté ligeramente delgado. La nutrición también puede ayudar a mejorar la masa muscular para fortalecer las articulaciones más débiles.

Suplementos nutricionales

Existe una fuerte evidencia de que los ácidos grasos omega-3 retrasan la progresión de la artritis, mejoran la función y disminuyen el dolor. Además, hay alguna evidencia de que la glucosamina y la condroitina ayudan a retrasar la progresión, pero por sí solas no mejoran el dolor o la función de la enfermedad articular existente.

Inyectables

En la actualidad existen diferentes productos comercializados que ayudan a mejorar la función articular de diferentes formas: ayudando al gato a producir más líquido articular más espeso, favoreciendo la cicatrización del cartílago irregular y la reparación de pequeños y dolorosos desgarros en la cápsula articular. También existen productos que utilizan el sistema inmunológico para bloquear el factor de crecimiento nervioso, un factor importante en el dolor articular.

Cuidados y rehabilitación

Debido a que los gatos con artritis tienen problemas para acicalarse, es importante mantener correctamente tanto el manto como las garras, así como proporcionarles un entorno cómodo y agradable adaptado a su movilidad.

El láser terapéutico es un dispositivo médico que utiliza la energía de la luz para aliviar el dolor y mejorar la función articular. Es muy seguro incluso en gatos con enfermedades hepáticas o renales.

Medicamentos orales y transdérmicos

Los antiinflamatorios no esteroideos (AINE) son medicamentos de acción rápida que alivian el dolor. Idealmente, se reservan para su uso en los días más dolorosos. Los AINE pueden causar daño hepático o renal o sangrado estomacal, especialmente si se toman en exceso. Tramadol y buprenorfina son analgésicos narcóticos suaves. Son seguros para los gatos que toman prednisolona, que son propensos al sangrado gastrointestinal o tienen dolor por múltiples problemas de salud.

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Treating feline arthritis with spectrum of care. DVM 360.