En un estudio reciente publicado en la revista Parasites & Vectors, un grupo de investigadores veterinarios de la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria y la Universidad de Salamanca formado por Sara N. García-Rodríguez, Noelia Costa Rodríguez, Jorge I. Matos, Yaiza Falcón Cordón, Rodrigo Morchón, Elena Carretón y José A. Montoya-Alonso, han examinado la posible relación entre la dirofilariosis felina y la hipersensibilidad a los alérgenos ambientales.
Dirofilaria immitis es el parásito causante de la dirofilariosis felina y puede provocar signos respiratorios, hiperreactividad de las vías respiratorias, remodelación e inflamación. Por otro lado, la alergia es una enfermedad compleja con múltiples factores involucrados, y estudios anteriores han demostrado la influencia de varios helmintos parasitarios en el desarrollo de alergias en humanos y otras especies.
El objetivo de este estudio fue determinar si los gatos seropositivos para D. immitis presentaban hipersensibilidad a algunos alérgenos ambientales. Para ello, se recopilaron muestras de sangre de 120 gatos y se analizaron para detectar la presencia de anticuerpos de inmunoglobulina G específicos contra D. immitis, así como la presencia de hipersensibilidad a 20 alérgenos diferentes utilizando kits comerciales de prueba de alérgenos.
Los resultados revelaron que el 60 % de los gatos analizados eran seropositivos para la presencia de anticuerpos IgG anti-D. immitis, y el 45,8 % de ellos mostraron signos clínicos de dirofilariosis de naturaleza respiratoria. Los resultados de las pruebas de alérgenos indicaron que el 50,8 % de los gatos eran seropositivos para al menos un alérgeno, siendo los alérgenos más comunes Dermatophagoides farinae (25,8 %), Dermatophagoides pteronyssinus (20 %), Malassezia (17,5 %) y Ctenocephalides felis (14,2 %).
Se observó que la prevalencia de alergias era significativamente mayor en los gatos seropositivos para D. immitis en comparación con los gatos seronegativos (68,1 % frente a 25 %). Además, no se encontraron diferencias significativas entre la prevalencia de gatos alérgicos y la presencia o ausencia de síntomas, lo que sugiere que los síntomas no eran un factor determinante para la presencia de alergias. De hecho, el riesgo de desarrollar alergias fue 6,3 veces mayor en los gatos seropositivos para D. immitis en comparación con los gatos seronegativos, lo que confirma que la seropositividad para D. immitis es un factor de riesgo.
En conclusión, este estudio demuestra que los gatos con dirofilariosis confirmada pueden desarrollar signos respiratorios graves, lo que puede llevar a una lesión pulmonar permanente y aumentar la predisposición a enfermedades de las vías respiratorias hiperreactivas. Estudios anteriores también han demostrado que la seropositividad para D. immitis y Wolbachia está relacionada con la presencia de broncoconstricción y broncoespasmo en los gatos afectados. Estos hallazgos respaldan la sospecha de que el contacto con D. immitis puede ser un factor de riesgo para el desarrollo de alergias en gatos.
García-Rodríguez, S.N., Costa-Rodríguez, N., Matos, J.I. et al. Feline heartworm disease and environmental allergens hypersensitivity: is there a link?. Parasites Vectors 16, 192 (2023). https://doi.org/10.1186/s13071-023-05776-3