El síndrome obstructivo de las vías respiratorias braquicefálicas (BOAS) es una afección común en razas de perros con estructuras faciales planas, como Bulldog francés, Bulldog inglés, Pekinés o Carlino. Este trastorno puede provocar dificultades respiratorias significativas, especialmente durante la anestesia y después de una intervención quirúrgica. Un reciente estudio sobre las complicaciones respiratorias posanestésicas en perros sometidos a cirugía para tratar el BOAS ha revelado hallazgos importantes sobre los riesgos y los factores que pueden aumentar la incidencia de complicaciones.
En un análisis retrospectivo de 199 registros clínicos, se observó que las complicaciones respiratorias postoperatorias más comunes fueron la hipoxemia (5%), la disnea que requirió reintubación traqueal (7%), la disnea que requirió traqueostomía (5%) y la neumonía por aspiración (6%). El estudio también encontró que ciertos factores pueden influir en la probabilidad de desarrollar complicaciones, como un mayor grado de BOAS y la presencia de neumonía por aspiración antes o después de la cirugía.
En particular, se identificaron factores de riesgo clave para la traqueostomía postoperatoria, como la neumonía por aspiración preexistente y el grado de gravedad del BOAS, lo que refuerza la importancia de una evaluación exhaustiva antes de realizar la cirugía.
Los propietarios de razas braquicefálicas deben ser conscientes de estos riesgos y hablar con su veterinario sobre las mejores opciones de manejo antes y después de la cirugía para reducir las complicaciones respiratorias. La vigilancia postoperatoria, junto con un enfoque preventivo de condiciones preexistentes como la neumonía por aspiración, es fundamental para asegurar la recuperación de los perros afectados por el BOAS.