Durante 2021, las protectoras españolas recogieron 285.000 perros y gatos, una cifra muy similar al año anterior (286.000 en 2020) y por debajo del número de animales que se recogían los años anteriores a la pandemia. Comparado con 2019, la cifra total de animales de compañía que llegaron a los refugios en el pasado año fue de un 7 % menos. Así lo indican los datos de la nueva edición del estudio Él nunca lo haría 2021, de Fundación Affinity, que una vez más constata que el abandono y la pérdida constituyen el principal problema de bienestar y calidad de vida de los perros y gatos en España.
Hay variaciones en función de la especie. En este sentido, la llegada de perros a los refugios aumentó ligeramente en 2021 (3 %), tras un fuerte descenso del 12 % el año anterior debido a la disminución de animales perdidos y abandonados durante los meses de confinamiento. En el caso de los gatos, su llegada a las protectoras se redujo en un 5 %, lo que representa el primer descenso que se observa en este sentido en los últimos cinco años.
El informe advierte que estos datos, ligeramente optimistas, deben situarse en un contexto aún lejos de ser normal. En 2021 las restricciones a la movilidad aún se mantuvieron durante algunos meses, por lo que habría que esperar a analizar los datos de 2022 para hablar de un posible cambio de tendencia. El estudio también confirma que el ligero descenso de los animales recogidos en 2020 fue coyuntural, reflejo del impacto de las restricciones de la movilidad en el estilo de vida de las familias, una situación que, aunque en menor medida, continuó en 2021 y que podría haber influido en los resultados de este año.
Según los datos del estudio Él nunca lo haría 2021, en 2021 llegaron 118.000 gatos a los refugios españoles, un 5 % menos que en 2020 y la cifra más baja del último lustro.
“Es cierto que los datos muestran una bajada del 5 % en la llegada de gatos a las entidades, pero creemos que el abandono y la pérdida de gatos sigue siendo hoy el gran reto tanto de las entidades como de la sociedad. Tengamos en cuenta que no solo llegan miles de gatos a las entidades, sino que otros acaban en colonias, también gestionadas en su mayoría por las protectoras. Si a esto le sumamos el fuerte incremento de la llegada de cachorros, más de la mitad, y que las camadas no deseadas son el primer motivo de abandono declarado, llegamos a la conclusión que la esterilización es una medida clave y necesaria para frenar este fenómeno”, explica Isabel Buil, directora de Fundación Affinity.