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¿Por qué es importante controlar la hipertensión en gatos?

La hipertensión es una enfermedad que se conoce desde hace años y, aunque es una patología frecuente (se calcula que afecta a 1 de cada 6 gatos de más de 7 años), sabemos que habitualmente permanece sin diagnosticar. Además, es una enfermedad frecuentemente ligada a otras patologías como la enfermedad renal crónica (ERC) y el hipertiroidismo: aproximadamente 1 de cada 3 gatos con ERC y 1 de cada 4 gatos con hipertiroidismo son hipertensos.

Podemos evaluar la hipertensión según la guía del ACVIM en función del riesgo de lesiones en los órganos diana (ver tabla).

El amlodipino es el tratamiento de pri­mera elección para tratar la hipertensión. Hasta ahora se tenían que utilizar medica­mentos diseñados para su uso en medicina humana, que provocaban serios proble­mas a la hora de conseguir una dosis ajus­tada. Con Amodip, el primer medicamento registrado en Veterinaria para tratar la hipertensión felina, Ceva proporciona una fácil solución a esta enfermedad.

¿Para qué está indicado Amodip?

Amodip es un comprimido palatable desarrollado para el tratamiento de la hipertensión en los gatos. Cada compri­mido contiene 1,25 mg de amlodipino y puede dividirse en dos partes iguales.

¿En qué casos debería realizarse una medición de la tensión sanguínea en gatos?

La hipertensión no suele dar una sinto­matología evidente, por eso se la conoce como “el asesino silencioso”; va pasando desapercibida hasta que causa daños irre­versibles en los órganos diana como los ojos, los riñones, el corazón o el cerebro.

Por este motivo es muy importante rea­lizar mediciones periódicas de la presión arterial a los gatos mayores de 7 años, y especialmente a los gatos con evidencias de lesiones en órganos diana: sensibilidad a la luz, retinopatía y coroidopatía, encefa­lopatía hipertensiva, anormalidades cardia­cas, enfermedad renal crónica y signos no específicos como letargo y apetito dismi­nuido. También a los pacientes felinos que están en tratamiento con glucocorticoides, mineralocorticoides, cloruro sódico, etc.

Los gatos hipertensos con signos ocula­res o nerviosos deben ser tratados inme­diatamente, para limitar el daño y evitar la progresión de las lesiones.

En caso de que un gato ya haya desa­rrollado la enfermedad renal crónica, ¿es posible administrar Amodip junto con Nelio, el benaceprilo de Ceva?

Como ya hemos apuntado, muchos gatos que sufren hipertensión tienen también una disfunción renal.

El amlodipino disminuye la presión arte­rial sistémica y, en consecuencia, la presión en los capilares glomerulares. El benaceprilo, como todos los IECA, disminuye la presión en los capilares glomerulares vasodilatando la arteriola eferente, pero es relativamente ineficaz en la disminución de la presión arterial sistémica. Por lo tanto, el tratamiento de elección en gatos con hipertensión y ERC que son proteinúricos consiste en la combi­nación de amlodipino y un IECA.

¿Cuál es el mecanismo de acción del amlodipino para combatir la hiperten­sión?

El amlodipino es un bloqueante o antagonista de los canales del calcio (ver figura). Es más selectivo con los canales de calcio que se encuentran en el músculo liso vascular frente a los que se encuentran en el miocardio. La acción antihipertensiva del amlodipino se debe principalmente a su capacidad para disminuir la resistencia periférica total relajando los músculos lisos vasculares de arterias y arteriolas. El amlo­dipino tiene un comienzo de acción lento, es importante para minimizar el reflejo de taquicardia en respuesta a la caída de la presión sanguínea y su efecto es duradero.

¿Qué resultados han arrojado los estu­dios clínicos de eficacia del producto?

Ceva ha formado parte del estudio ESCAT, el mayor estudio doble ciego en gatos con hipertensión sistémica, para evaluar la eficacia en la disminución de la presión sanguínea y la seguridad del amlo­dipino, administrado a dosis de 0,125 a 0,5 mg/kg/día.

La media de disminución de la presión sanguínea fue de 28,2 mmHg entre el día 1 y el día 28 en el grupo tratado con Amodip. La mayoría de los efectos adversos fueron “no graves” y auto-limitantes, así como espe­rables en una población de gatos mayores. La conclusión del estudio fue que Amodip en dosis diaria de 0,125 a 0,5 mg de amlo­dipino/kg es una medicación antihiperten­siva para gatos eficaz y segura.

¿Qué pueden decirnos de la palatabili­dad del producto?

La palatabilidad durante las 4 primeras semanas de tratamiento con amlodipino fue del 80 %. Eso ha permitido obtener la certificación “Easy to give” de la ISFM, lo que avala su facilidad de administración. La alta palatabilidad ayuda a que los pro­pietarios mantengan el cumplimiento, algo muy importante en un tratamiento de por vida como es el de la hipertensión.

¿Cuáles son las presentaciones dispo­nibles y cómo se dosifica Amodip?

Amodip se presenta formulado en com­primidos palatables fraccionables por la mitad que contienen 1,25 mg de amlodi­pino y se comercializa en envases de 30 comprimidos. Estos deben administrarse por vía oral con o sin comida.

La dosis inicial de Amodip es de 0,125 mg de amlodipino /kg/día. A los 14 días del inicio del tratamiento hay que medir de nuevo la presión sanguínea sistólica. Si ha disminuido por debajo de 150 mmHg, se mantendrá la misma dosis. Si la presión sanguínea es mayor a 150 mmHg, o si ha disminuido menos de un 15 % respecto a la presión inicial, hay que doblar la dosis de Amodip a 0,25 mg/kg/día.