Actualmente no existe una vacuna disponible comercialmente contra la peste porcina africana (PPA), aunque se han presentado varios resultados esperanzadores como el del grupo encabezado por José Manuel Sánchez-Vizcaíno.
El virus de la peste porcina africana (VPPA) es altamente contagioso para los cerdos domésticos y jabalíes.
En el estudio*, realizado por un equipo de investigadores del Centro de Enfermedades Animales de Plum Island, Servicio de Investigación Agrícola, Departamento de Agricultura de los Estados Unidos, tanto las dosis bajas de vacuna como las altas fueron 100 % efectivas contra el VPPA cuando los cerdos se desafiaron 28 días después de la inoculación.
Según ha declarado Douglas P. Gladue, investigador principal, a Science Daily, la investigación fue motivada por el brote de PPA que tuvo lugar el año 2007 en la República de Georgia. "Este fue el primer brote en la historia reciente fuera de África y Cerdeña, donde la peste porcina es endémica, y esta cepa en particular ha sido altamente letal y altamente contagiosa, extendiéndose rápidamente a los países vecinos”. Esta es también una nueva cepa del virus, ahora conocida como VPPA-G (la G significa Georgia).
El brote de 2007 también fue el origen de la extensión de la PPA por Europa del Este y el este de Asia, añadió Manuel V. Borca.
Según Glaude, se ha demostrado que existe una protección cruzada limitada entre cepas del VPPA, probablemente porque los antígenos y el grado de virulencia difieren entre ellos, y ninguna de las vacunas experimentales históricas ha demostrado ser efectiva contra el VPPA-G.
En función de este último dato, los investigadores se propusieron desarrollar una vacuna.
Parte del proceso de desarrollo de vacunas de virus completos implica la eliminación de genes de virulencia del virus. Pero cuando los investigadores eliminaron genes similares a los que se habían eliminado en cepas del VPPA más antiguas para atenuarlos, Glaude declara que "quedó claro que el VPPA-G era mucho más virulento” que los otros aislamientos históricos, porque conservaba un mayor nivel de virulencia.
Por lo tanto, los investigadores se dieron cuenta de que necesitaban un objetivo genético diferente para atenuar el VPPA-G.
Utilizaron una metodología predictiva llamada computational pipeline para predecir el papel de las proteínas en el virus.
Gracias a la metodología aplicada, se pudo predecir que una proteína llamada I177L podría interferir con el sistema inmunitario del cerdo.
Cuando eliminaron este gen, VPPA-G se quedó completamente atenuado.
Curiosamente, ASFV-G-ΔI177L confiere protección incluso en dosis bajas (102 HAD50) y permanece completamente atenuada cuando se inocula en dosis altas (106 HAD50), lo que demuestra su potencial como un candidato seguro para la vacuna. En dosis medias o más altas (104 HAD50) se logra inmunidad estéril.
Los investigadores declaran que ASFV-G-ΔI177L es:
Se necesita más trabajo para cumplir con los requisitos reglamentarios para la comercialización, añadió Gladue, pero "esta nueva vacuna experimental contra el VPPA parece prometedora y ofrece una protección completa contra la cepa actual que actualmente produce brotes en Europa del Este y Asia”.
*Borca MV, Ramirez-Medina E, Silva E, et al. Development of a highly effective African swine fever virus vaccine by deletion of the I177L gene results in sterile immunity against the current epidemic Eurasia strain. Journal of Virology (2020). doi: 10.1128/JVI.02017-19.