Según informaba el Ministerio de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino (MARM) en un comunicado el pasado 4 de mayo, el Parlamento Europeo ha dado luz verde a un proyecto de Reglamento, que deberá aprobar el Consejo de Ministros de la UE, sobre gestión de los residuos animales no destinados a consumo humano (los SANDACH).
El nuevo reglamento aclara las responsabilidades de los operadores y de las autoridades competentes en materia de estos subproductos, así como también incluye la posibilidad de autorizar sistemas de almacenamiento temporal hasta que sean eliminados. Esto último permitiría la utilización de sistemas de hidrólisis de cadáveres en las explotaciones ganaderas.
Otra de las novedades que introduce es que se habilita un procedimiento más ágil para modificar la categorización de los subproductos animales y se mejora el sistema de obtención de autorización para su movimiento intracomunitario para agilizar la gestión de los operadores.
Una de las cuestiones más polémicas a las que pone solución este nuevo Reglamento es que se flexibilizan los requisitos vigentes para la alimentación de especies de aves necrófagas amenazadas: se podrán desarrollar alternativas a los muladares cercados (que podrán seguir funcionando como hasta ahora) y bajo requisitos sanitarios que garanticen un nivel de seguridad equivalente. Además, los SANDACH se podrán utilizar para la alimentación de otras especies de carnívoras amenazadas, como el oso o el lobo.