En esta evaluación, la CE recoge los resultados de una inspección de la Oficina Veterinaria y Alimentaria europea, realizada en Uruguay en marzo de este año, para examinar las medidas de vigilancia que toman las autoridades nacionales respecto a las carnes exportadas a los países de la UE.
Los inspectores concluyeron que los sistemas de supervisión oficial uruguayos para la exportación de carnes rojas, de caza ó alimentos derivados son "satisfactorios" en general.
Sin embargo, la CE señala que hacen falta "progresos" en la identificación individual de ganado y que existen algunas "deficiencias" sobre controles en la producción de carne de caballo, así como en los requisitos sobre el bienestar de los animales a la hora de ser sacrificados.
En dicha misión, los expertos de la CE estudiaron controles en la producción de carnes de especies como vacuno, ovino, caballo ó de liebre.
Las autoridades uruguayas han respondido al dictamen de la CE con explicaciones sobre sus proyectos legislativos y planes, con los que esperan responder a los requisitos europeos.