Alternativas de manejo reproductivo del rodeo

Med. Vet. (M.Sc.) Sebastián Vittone
INTA Concepción del Uruguay. jvittone@concepcion.inta.gov.ar

Las sucesivas crisis hídricas y el incremento de carga en los campos ganaderos derivado del desplazamiento de la ganadería a zonas no agrícolas, impacta sobre la cadena de producción de carne provocando mermas en la producción de terneros. Cuando mejorar la oferta forrajera no está dentro de las posibilidades de la empresa y ocurren este tipo de contingencias, las siguientes prácticas son alternativas consideradas válidas: el destete definitivo, precoz e hiperprecoz, y los productos hormonales inductores de celo.

El destete hiperprecoz y los progestágenos

El destete rompe el vínculo vaca-ternero. Con ello cesa la fuga de nutrientes destinada a la producción de leche, permitiendo que la vaca empiece a recuperar su condición corporal y liberar al sistema endocrino para que aparezca el celo. No obstante, muchas veces en condiciones de sequía extrema el estado nutricional de los vientres es tan pobre que no basta con destetar el ternero sino que, además, es necesario aplicar hormonas para que inicie la actividad sexual dentro de la temporada de servicio y lograr la preñez. Es aquí donde la progesterona o sus análogos sintéticos, los progestágenos, juegan un importante rol emulando la función que naturalmente produce el cuerpo lúteo en el ovario, disparando el sistema endocrino para que la vaca comience a ciclar.

Una situación llevada al extremo sería la de la vaquillona con su primer ternero al pie donde, en el mejor de los casos, no es esperable superar el 20% de preñez porque está nutricionalmente comprometida. Sin embargo, es posible mejorar el resultado combinando las herramientas tecnológicas disponibles. En una experiencia conducida en la Estación Experimental Agropecuaria (EEA) del INTA de Concepción del Uruguay sobre vaquillonas de muy pobre condición corporal (tabla 1).

Tabla 1. a, b: Valores con letras diferentes en la misma columna difieren significativamente (p<0,05).

Resultados como éste demuestran la importancia de seleccionar y combinar adecuadamente las técnicas disponibles para salvar situaciones críticas de este tipo.

Destete hiperprecoz: oportunidad para inseminar las vacas

Si bien la respuesta al destete está ligada a la condición corporal de los vientres, el porcentaje de celo/ovulación que se obtiene aplicando destete hiperprecoz junto a protocolos de sincronización de celos (progesterona/estradiol, por ejemplo) suele ser muy buena (≥ 80%), aún en condiciones corporales bajas (3–3,5 puntos). Por lo tanto, es una oportunidad que no se debería dejar pasar para incluir la inseminación artificial a tiempo fijo (IATF), con todas las ventajas que ella trae: mejora genética, incremento de cabeza de parición, entre otras.

Existen varios productos hormonales para sincronizar celos pero, en general, las vacas que son sometidas a destete precoz o hiperprecoz se encuentran en anestro (no celan, no ovulan) y el tratamiento de elección para estos casos es el de progesterona en todas sus variantes. En relación con esto, es importante tener en cuenta a la hora de implementar una IATF junto al destete, el momento en que será ejecutado este último en función del protocolo de sincronización de celos que se elija.

¿Cuándo destetar en un servicio con IATF?

En la EEA de Concepción del Uruguay se ha investigado para identificar en qué momento se debe efectuar el destete durante un tratamiento de inducción/sincronización de celos con progesterona/estradiol para obtener el mejor resultado de una IATF. En todas estas experiencias se evaluaron 3 momentos de ejecución del destete utilizando el Sistema Ruter® (ACA) ya que, en la mayoría de los casos, los terneros fueron destetados con menos de 50 días de edad.

Los momentos de destete evaluados fueron:

Antes: destete 10 días antes de colocar el dispositivo con progesterona.
Al inicio: destete el día de colocación del dispositivo.
Al finalizar: destete el día del retiro del dispositivo.

A su vez, estos momentos de destete fueron realizados en vacas de diferente condición corporal y la mejor respuesta se obtuvo en un rodeo de vacas de baja condición corporal (CC=3; 87% de anestro), cuando el destete hiperprecoz se realizó antes o al inicio del tratamiento con progesterona. Si bien es sabido que la mejor respuesta al destete se obtiene en vacas de pobre estado corporal, en este caso la diferencia en la tasa de ovulación y preñez fue notablemente más baja cuando se destetó al finalizar el tratamiento con progesterona y en un grupo control que mantuvo el ternero al pie (tabla 2).

Tabla 2. a, b: Valores con letras diferentes en la misma fila difieren significativamente (p<0,05).

Aunque la respuesta del destete realizado antes del tratamiento con progesterona fue más que satisfactoria, dada la condición corporal de los vientres, el momento indicado para efectuar el destete sería al inicio del tratamiento hormonal (figura 1), no solo porque las tasas de ovulación y preñez son mayores sino también desde el punto de vista operativo (un encierre menos).