La gripe aviar no está dando tregua en los Países Bajos este otoño. Un reciente brote declarado la semana pasada en una granja de la localidad de Lutjegast obligó a sacrificar a 48.000 pollos. Días después, ante la aparición de otro brote en una granja de la zona de Frisia la Autoridad de Seguridad de Productos de Consumo y Alimentos de los Países Bajos (NVWA) ha ordenado el sacrificio de alrededor de 122.500 pollos de engorde para frenar la expansión de la enfermedad. Las autoridades señalaron que probablemente se trate de una variante altamente patógena de la gripe aviar.
Dentro de este último brote hay otra granja avícola en un radio de 3 kilómetros alrededor de la afectada que está siendo investigada por si la gripe aviar se hubiera propagado, y también existen otras 14 granjas en un radio de 10 kilómetros alrededor de la instalación infectada.
Nada más conocerse el último brote se anunció la prohibición de transporte para las granjas avícolas en una zona de 10 kilómetros alrededor de la afectada, que se aplica a todas las aves y a los huevos para incubar y de mesa, el estiércol de aves y la basura generada, y a otros animales y productos animales de las granjas avícolas. También se ha prohibido cazar en esta área.
Igualmente, se está llevando a cabo una investigación de rastreo de los contactos de alto riesgo en los alrededores de la granja afectada, en la que la NVWA examina si se ha producido un "contacto de riesgo" entre la empresa infectada y otras ubicaciones. Por ejemplo, se considera un contacto de riesgo cuando un visitante ha estado en una granja infectada y luego ha visitado otra empresa. Si es necesario, se tomarán medidas adicionales en respuesta a los resultados de la investigación.
El gobierno holandés ha solicitado al grupo de expertos en enfermedades animales del departamento de Investigación Bioveterinaria de la Universidad de Wageningen una nueva evaluación de riesgos en respuesta a las infecciones recientes, e investigará la composición genética del virus y los vínculos con virus encontrados desde octubre de 2021 en los Países Bajos.
El primer gran brote de gripe aviar en el país de este otoño se declaró el 26 de octubre en el entorno de Zeewolde. A consecuencia de este brote, el gobierno estableció la obligación de confinamiento para todas las granjas avícolas comerciales en los Países Bajos. Los zoológicos, los zoológicos de mascotas y los granjeros domésticos deben mantener cercadas sus aves de corral y aves acuáticas para evitar el contacto entre estas y las aves silvestres enfermas o sus excrementos.
Del mismo modo, hay una prohibición a nivel nacional de exponer aves de corral y acuáticas, y las visitas a los refugios donde se mantienen las aves en riesgo.