El decreto introduce esta figura como opcional, aunque su designación permite a las explotaciones contar con un profesional que gestione de forma continua los aspectos sanitarios.
CEVE considera que “no resuelve la situación de inseguridad jurídica que las empresas veterinarias sentimos en relación con el uso de medicamentos veterinarios en la práctica diaria de nuestra actividad”.
El Ministerio de Sanidad ha revisado la norma después de que los sectores afectados por la regulación hayan identificado la necesidad de cambiar o clarificar algunos aspectos del texto.
El texto incorpora al ordenamiento nacional el reglamento europeo que garantiza la aplicación de la legislación sobre alimentos y piensos, y de las normas sobre salud y bienestar de los animales, sanidad vegetal y productos fitosanitarios.
El Colegio de Veterinarios de Madrid trasladó sus obervaciones sobre el proyecto a la Organización Colegial Veterinaria, que ya han sido remitidas al Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación.
El ministerio de Agricultura abre hasta el 7 de mayo la consulta pública para presentar observaciones y comentarios, tanto de particulares como de las organizaciones más representativas potencialmente afectadas.
El documento entró en una nueva fase de consulta tras incorporar algunas modificaciones, como las que se refieren a mejorar las condiciones de bienestar en las instalaciones donde alojar al ganado.
Asociaciones y ciudadanos pueden opinar sobre los problemas que se pretenden solucionar con la nueva norma, la necesidad y oportunidad de su aprobación y sus objetivos.
Se adapta a la normativa europea y extiende a otras especies la obligatoriedad ya existente para las granjas avícolas y de porcino intensivo de contar con un plan de bienestar animal.