En lugar de pasar 17 horas al día pastando y deambulando libremente, los caballos alojados en establos pasan 17 horas haciendo “otras” actividades, algunas de las cuales son poco deseables para sus cuidadores.
Según un equipo de investigación de la Universidad Estatal de Maringa en Brasil, “los animales alojados en boxes en los establos no tienen autonomía sobre la elección de los alimentos o la duración del ramoneo y tienden a estar inactivos entre comidas. Además, otras actividades normales, como la interacción social y el descanso, se ven afectadas cuando los caballos están confinados en boxes. Los periodos cortos de alimentación combinados con largos intervalos entre comidas pueden promover comportamientos anormales o estereotípicos en los caballos. Por lo tanto, aunque los boxes pueden proporcionar seguridad, pueden afectar negativamente al bienestar y rendimiento de los animales”.
Kathleen Crandell, Ph.D. nutricionista de Kentucky Equine Research afirmó que “Las prácticas de alimentación de los caballos domésticos, en particular las de los que viven en boxes durante la mayor parte del día, están lejos de ser naturales. Estos investigadores sugieren que pesar los alimentos, usar redes de heno de pequeños agujeros o alimentadores lentos, y proporcionar menor cantidad de comida con más frecuencia pueden reducir los comportamientos indeseables y mejorar el bienestar equino cuando los caballos deben ser confinados en los boxes”.
Bueno Ribeiro, L., T. Vasconcelos Matzkeit, J. Teodoro de Souza Nicolau. 2019. Determinants of undesirable behaviors in American Quarter Horses housed in box stalls. Journal of Equine Veterinary Science 80:69-75.