Según publica JAVMA, una evaluación de la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA por sus siglas en inglés, U.S. Food and Drug Administration) publicada en agosto indica que los veterinarios, los productores de ganado y los operadores de fábricas de piensos evaluados por la agencia rara vez infringen la normativa que entró en vigor en 2017 sobre las directivas en piensos medicados, que son similares a las prescripciones.
Esas directivas se comenzaron a seguir de forma mayoritaria por parte de los veterinarios de producción animal a partir de enero de 2017, cuando el FDA Center for Veterinary Medicine modificó las aprobaciones de aproximadamente 300 aplicaciones de medicamentos.
Los objetivos son:
Todos los medicamentos afectados ahora deben usarse bajo la supervisión de un veterinario para combatir un patógeno específico.
El informe de la FDA cubre las inspecciones durante los años fiscales 2016-18, desde octubre de 2015 hasta septiembre de 2018, lo que implica desde 14 meses antes de que cambiara la normativa hasta 22 meses después.
Los funcionarios de la FDA realizaron 456 inspecciones, incluidas al menos 66 en veterinarios:
Los veterinarios que fueron inspeccionados:
Los errores incluían falta de información sobre tiempos de retirada, ausencia de instrucciones y de declaraciones de advertencia, o presencia de errores en las mismas.