El sector porcino es el principal sector ganadero en España y posiciona al país como uno de los mayores productores de cerdo tanto a nivel europeo como mundial.
La estabilidad del sector depende, en gran medida, del nivel de exportaciones de animales vivos y sus productos tanto a otros Estados miembros como a países terceros; una dependencia que va en aumento con cada año que pasa.
El mantenimiento de la cabaña porcina española libre de enfermedades de declaración obligatoria, como la peste porcina africana (PPA), es vital para que dicho flujo comercial funcione perfectamente y, por consiguiente, para la rentabilidad de las granjas de cerdos y del sector en general.
El primer plan nacional de vigilancia se presentó en el año 2006, tal y como refleja el RD 1186/2006, de 13 de octubre.
Este primer RD fue modificado en el 2011 por el RD 599/2011, por el que se fijan las bases técnicas en las que se apoya la vigilancia de estas enfermedades, que vienen desarrolladas y adaptadas mediante el correspondiente Programa Nacional de Vigilancia Sanitaria Porcina.
Debido a los resultados del análisis de riesgo realizado como consecuencia del cambio de situación epidemiológica causado por el incremento en la incidencia de PPA en los países del centro y este de Europa y Rusia, y tal y como indican las recomendaciones de la Comisión Europea (CE), se hace necesario incrementar los esfuerzos de vigilancia con el objetivo de conseguir una detección temprana en el caso de que se produzca la incursión de virus de la PPA en España.
Durante los últimos meses se ha seguido confirmando la presencia de PPA dentro de la zona de restricción establecida por la CE y que afecta a varios países comunitarios; lo cual indica que el riesgo sigue presente.
La existencia en estos países de pequeñas explotaciones de traspatio con bajos niveles de bioseguridad y la afectación de la población de jabalíes silvestres suponen un riesgo significativo de difusión de la enfermedad hacia el resto de la UE y, en consecuencia, hacia España, por lo que se hace necesario seguir con la vigilancia reforzada durante el año 2020.
El plan de vigilancia*, actualizado por el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación (MAPA), tendrá un componente:
Además, se establece una vigilancia especial en las condiciones de limpieza y desinfección de los vehículos de transporte de animales vivos que procedan de los países de mayor riesgo con relación a la posibilidad de entrada de del virus de la PPA.
El programa de vigilancia estará orientado principalmente hacia la detección temprana de las enfermedades porcinas que tradicionalmente han tenido mayor repercusión en el sector como son la peste porcina clásica (PPC) y, muy especialmente, la PPA, sin dejar de lado cualquier otra enfermedad de declaración obligatoria que pueda afectar a los cerdos.
Este nuevo plan nacional de vigilancia tiene como objetivos principales:
Con la aplicación de este nuevo programa de vigilancia se conseguirá: