Un brote de peste porcina africana (PPA) en Haití notificado por la OIE el pasado domingo 19 de septiembre vuelve a encender las alarmas sobre la expansión de la enfermedad en el continente americano. Los datos aportados por el gobierno haitiano señalan que el brote se ha detectado en una granja porcina con unos 2.500 animales de Anse-à-Pitre, al sureste del país y cercana a la frontera con República Dominicana, donde también se dieron brotes de PPA en julio. En este caso, el virus ha afectado a 234 animales y ha motivado el sacrificio de 750 como medida para atajar la expansión de la enfermedad.
Este brote de PPA ha hecho que otros países americanos pongan en marcha medidas para evitar la propagación de la peste porcina africana. En Brasil, la Asociación Brasileña de Proteína Animal (ABPA) ha lanzado una extensa campaña multilingüe (en portugués, inglés, francés, criollo y español) en las redes sociales, que también enviará a empresas productoras y proveedoras de la cadena productiva y otras organizaciones relacionadas con el sector porcino.
Además, el Grupo Especial para la Prevención de la Peste Porcina Africana (GEPESA) de la ABPA ha aunado esfuerzos para reforzar con el Gobierno Federal brasileño para intensificar la defensa sanitaria, que incluyen la intensificación de inspecciones en los principales puertos de entrada del país, impidiendo el ingreso de productos cárnicos. Las autoridades brasileñas también han establecido una legislación más restrictiva sobre la entrada al país de productos porcinos y ha firmado un convenio de emergencia internacional para la prevención de la PPA
Sulivan Alves, directora técnica de ABPA, señaló que toda Latinoamérica se había puesto en estado de alarma a través del grupo #TodosContraLaPPA, con el que se ha establecido un intercambio de información y esfuerzos de 21 asociaciones de 18 países del continente latinoamericano, en una gran campaña continental.
Estados Unidos anunció a través de su Departamento de Agricultura (USDA) que prohibía la entrada al país de carne de cerdo y productos porcinos procedentes de la República Dominicana, tras la confirmación de un brote de PPA a través de un programa de vigilancia cooperativa. A partir de ese momento se han intensificado los controles e inspecciones de los vueltos con origen dominicano para controlar cualquier riesgo de entrada del virus de la peste porcina africana en el país norteamericano.