El pasado 29 de enero se confirmó un caso de peste porcina africana (PPA) en un jabalí encontrado muerto por un cazador en el municipio de Tornolo y comunicado al servicio veterinario de la Autoridad Sanitaria Local de Parma. El jabalí muerto fue encontrado en el marco de una búsqueda activa de cadáveres llevada a cabo por el Ámbito Territorial de Caza (ATC) 6 que, junto con otros ATC, colabora con la Autoridad Sanitaria Local de Parma para llevar a cabo este importante servicio. El día después del hallazgo, la sección de Parma del Instituto Zooprofiláctico Experimental de Lombardía y Emilia-Romaña llevó a cabo el examen anatomopatológico del cadáver, detectando las lesiones típicas de la enfermedad y la sección de Módena, el mismo día, llevó a cabo la prueba que confirmó la PPA.
El caso de Tornolo es el primer caso confirmado en la provincia de Parma, después de los registrados en la provincia de Piacenza a partir de noviembre y de los casos presentes desde enero de 2022 en las regiones vecinas y en otras partes del país. Sin embargo, sobre la base de una delimitación territorial establecida por un reglamento de la Comisión Europea, en el municipio de Tornolo, como en otros municipios de la provincia de Parma, en la frontera con Liguria, se adoptaron medidas extraordinarias de vigilancia, prevención y control de la enfermedad. Ya estaban vigentes con restricciones a la actividad cinegética, regulación de actividades al aire libre y restricciones al movimiento de cerdos criados, dependiendo también del nivel de bioseguridad de las granjas.
Ante la situación epidemiológica actual, las autoridades resaltan que resulta aún más importante que las explotaciones eleven al máximo el nivel de bioseguridad, es decir, el conjunto de medidas estructurales y de gestión que permitan reducir al máximo el riesgo de introducción y propagación de enfermedades en las propias explotaciones. un mínimo y que constituyan una garantía para poder aplicar exenciones a los movimientos de animales y productos. Para ello, la Región ya había previsto y asignado recursos en los últimos meses y continuará su compromiso de apoyar las inversiones que las empresas pretenden realizar a través de licitaciones destinadas a aumentar la bioseguridad en las granjas y al asesoramiento y formación de los operadores del sector.
Para poder controlar la PPA es necesario identificar tempranamente todos los casos, tanto dentro de las zonas donde el virus está circulando, para poder retirar los cadáveres que son focos del virus para los animales sanos, pero sobre todo en las zonas que aún no han sido afectadas por el virus, para identificar los territorios en los que es necesario aplicar con prontitud las medidas de control necesarias. Por este motivo, la ordenanza del consejo regional establece que quien vea un cadáver de jabalí, dondequiera que esté, deberá informar al servicio veterinario de la autoridad sanitaria local competente en el territorio, que intervendrá rápidamente para realizar la toma de muestras necesarias para excluir o confirmar la infección en la canal.