Efecto de la suplementación con inmunoglobulinas, probióticos y prebióticos sobre los parámetros productivos en lechones lactantes
Son abundantes las recomendaciones que permiten “ajustar” la alimentación de las cerdas para incrementar la calidad del calostro y la producción lechera.

Esta información aparece publicada en el número 251 de la revista Albéitar (diciembre de 2021), que se puede leer íntegramente aquí.
M. Hörstmann1, A. Schlagheck2, R. Crespo3 y J. Piñán4
1Product Management, 2Research & Development, 3Technical Manager Central Europe and LATAM, 4Technical Sales Manager
Biochem Zusatzstoffe Handels- und Produktionsges. mbH, Lohne, Germany
Cualquier decisión para ajustar la alimentación de las cerdas, con el fin de incrementar la calidad del calostro y la producción lechera para mejorar la viabilidad y productividad de los lechones, tendrá sus pros y sus contras, obteniendo resultados diversos, lo que influirá en el número de lechones que necesiten compensar la deficiencia con la que nacen, especialmente los más pequeños y últimos en nacer.
Independientemente de las “circunstancias nutritivas” que envuelven a las cerdas, los lechones necesitan una ayuda especial y urgente para superar los retos a los que se someten en las primeras horas de vida, una vez que abandonan el claustro materno.
El concepto Early Nutrition (nutrición precoz o temprana) contempla precisamente la ayuda, desde la nutrición, a los lechones que con frecuencia se ven afectados por:
- Insuficiente aporte de calostro. Común en cerdas hiperprolíficas y en cerdas carentes de marcado carácter lechero (ibéricas), lo que tiene como consecuencia un deficiente desarrollo de la inmunidad pasiva, limitando la capacidad de respuesta inmunitaria. El aporte extra de inmunoglobulinas, después de un correcto encalostramiento del lechón, ayudará a mejorar la inmunidad, la salud intestinal y aportará energía extra a todos los lechones, mejorando especialmente el desarrollo de aquellos que presenten bajo peso al nacimiento.
- Contacto con patógenos, que además del efecto perjudicial directo, puedendificultar la implantación de una microbiota beneficiosa, esencial para el correcto desarrollo del lechón.
- El aporte de probióticos coloniza rápidamente el intestino, dificultando la acción de los patógenos por un efecto de exclusión competitiva; además, ciertos probióticos crean un ambiente poco propicio para los patógenos mediante la producción de ácido láctico y otras moléculas con acción inhibitoria. Por su parte, los prebióticos favorecen el desarrollo de la microbiota nativa beneficiosa y, en el caso de las paredes de levadura, también tienen la capacidad de aglutinar patógenos como E. coli.
- Hipotermia. Agravada por la escasez de reservas energéticas e incluso de vitaminas y minerales (hierro, por ejemplo).
- Es frecuente el aporte de azúcares, como aporte energético, y/o cafeína, como estimulante, con escasos resultados. Resulta más efectivo el aporte de ácidos grasos de diferente longitud de cadena, para prolongar su efecto, como consecuencia de su aprovechamiento secuencial.
- Centrándonos en la labor que realizan las inmunoglobulinas para desarrollar la inmunidad pasiva, en general, a mayor ingestión de calostro con mayor contenido de inmunoglobulinas, mayor desarrollo de la inmunidad pasiva y, por tanto, mejor capacidad de respuesta inmunitaria.
Acceda a la versión digital de la revista Albéitar para leer la información al completo.
Tag
Artículos relacionados
Mas noticias
Cómo actuar ante un perro de asistencia
Estos animales son un miembro clave para muchas familias, especialmente aquellas con niños con TEA. Saber la manera de interactuar con ellos es clave para facilitar su vida y evitar posibles crisis.