Puedes leer el artículo completo en la revista digital Repropig nº 8.
J.R. Alvaro1, D. Bordes2, M. Marcos3, M. Jimenez3, R. Menjón3 y M. Collell3
1Genesus
2Piensos del Segre
3MSD Animal Health
Modificado del póster aceptado en el IPVS 2020 de Brasil
Como resultado de esta pérdida de eficiencia, los lotes de partos no se componen según lo previsto, lo que provoca pérdidas económicas. Los tratamientos hormonales con gonadotropinas pueden ayudar a inducir el celo y minimizar este aumento de DNP.
Los objetivos de este estudio fueron: por un lado, investigar el efecto de este tratamiento en cerdas problemáticas y, por otro, obtener además información sobre diferentes tratamientos con gonadotropinas1.
Este experimento se llevó a cabo en dos granjas españolas. La primera granja (granja 1) contaba con 1.250 cerdas, y la segunda granja (granja 2), con 2.200 cerdas.
Se trataron todas las cerdas problema que no mostraban celo la primera semana de noviembre. Un total de 104 animales fueron asignados aleatoriamente en dos grupos (Grupo A y Grupo B), y tratados de la siguiente manera:
Se determinaron los niveles de progesterona en todas las cerdas con un kit rápido de progesterona de uso en granja (Ovu-check®, Biovet)2. Los resultados de los tratamientos se analizaron estadísticamente utilizando las pruebas de Chi-Square y Unilateral Fisher.
A las cerdas destetadas que no mostraron signos de estro siete días después del destete se les aplicó el tratamiento y se obtuvieron los siguientes resultados (tabla 1):
A las cerdas no gestantes de la granja 1 (confirmadas por ecografía) se les aplicó el tratamiento del grupo A. El 82 % salieron en celo (n=11) tras el tratamiento (en este grupo de cerdas se decidió que se solo se utilizaba el tratamiento del grupo A).
En cuanto a las cerdas nulíparas en las que no se había detectado ningún signo de celo cuando ya habían llegado a su edad y peso óptimo, en la granja 1 se asignaron n=10 en el grupo A y n=10 en el grupo B. Un 60 % y un 20 % salieron en celo, respectivamente.
En la granja 2, un total de 30 cerdas se trataron con el tratamiento del grupo A, y un 67 % mostraron celo.
Antes del tratamiento con gonadotropina, se revisó el nivel de progesterona en sangre y se detectó el porcentaje de cerdas que no tenían progesterona y, por tanto, no tenían cuerpos lúteos en el momento en el que se realizaba el tratamiento. Estas cerdas son las que deberían responder a las gonadrotopinas.
En la tabla 2 se observa el porcentaje de cerdas que no tenían progesterona (negativo: <2,5 ng/ml de progesterona) y cómo fue su respuesta a los diferentes tratamientos. Las cerdas que presentaban niveles más altos de progesterona estaban en fase luteal y en ellas el tratamiento no hará su efecto.
El uso de gonadotropinas y la determinación de los niveles de progesterona pueden ser herramientas muy útiles para controlar el estado reproductivo de la cerda, y las gonadotropinas pueden inducir el celo en animales retrasados. Esto reduce los DNP y mejora la productividad y la organización en la granja. En el estudio, PG600® ha demostrado ser más eficaz en la inducción del estro con diferencias estadísticamente significativas en comparación con un producto genérico.
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