Se ha puesto en marcha un ambicioso proyecto de transformación sostenible de la ganadería familiar y cooperativa en explotaciones de Cataluña, Euskadi, Navarra y Cantabria. La iniciativa supondrá una inversión de 110 millones de euros entre 2021 y 2026, tratando de forma integral la mejora de la producción lechera y su logística, así como la transformación digital del sector, y está impulsada por las cooperativas Llet Nostra, Kaiku Berdea y AGC Agrocantabria, que contarán con el apoyo de los gobiernos autonómicos y con la colaboración de centros tecnológicos y de investigación como los vascos Azti y Neiker, INTIA en Navarra y el IRTA. Por parte del IRTA, el liderazgo correrá a cargo del programa de Sostenibilidad en biosistemas, aunque habrá implicados otros programas.
El proyecto será un frente común entre varios actores para hacer frente al cambio climático, en el que se revisarán todos los agentes de la cadena láctea desde la elaboración hasta la distribución para lograr una producción más sostenible que garantice, además , una buena salud económica y social de las granjas familiares.
Entre las medidas que se plantean para reducir la huella ambiental se encuentra la transformación digital del sector a través de nuevas infraestructuras tecnológicas, la automatización y el uso de aplicaciones de inteligencia artificial y el Big Data, así como la mejora de la eficiencia en la producción.
Formarán parte de esta iniciativa un total de 603 explotaciones ganaderas familiares, que producen en su conjunto 337 millones de litros de leche, 9 empresas distribuidoras con 791 empleados y 6.900 clientes del canal Hostelería de las comunidades implicadas.
La consejera de Acción Climática, Alimentación y Agenda Rural de la Generalitat de Catalunya, Teresa Jordà, presentó este proyecto en un acto celebrado en la explotación El Molino de Vizcaya, en Euskadi. Jordà aprovechó el acto para destacar el apoyo del Govern a un tránsito hacia “una ganadería aún más sostenible y respetuosa con los recursos naturales” y reivindicó la ganadería familiar y cooperativa como “un pilar imprescindible para impulsar esta transformación”.