452 votos a favor, 170 en contra y 76 abstenciones conforman el resultado de la votación llevada a cabo por el Parlamento Europeo a una resolución favorable a la estrategia "De la granja a la mesa", que ya recibió el apoyo de la Federación de Veterinarios de Europa y que según la Cámara europea servirá para "producir alimentos más sanos, garantizar la seguridad alimentaria y unos ingresos justos a agricultores y ganaderos y reducir la huella ambiental del sector".
La Cámara ha mostrado su preocupación por que se mejore la sostenibilidad en todas y cada una de las fases de la cadena de suministro alimentario, y destaca que todos los eslabones, desde el agricultor y el ganadero al consumidor, desempeñan un papel. Por ello, y para que los productores puedan llevarse una parte justa de los beneficios obtenidos con alimentos producidos de forma sostenible, los eurodiputados piden a la Comisión que redoble sus esfuerzos para fortalecer la posición de estos en la cadena de suministro, adaptando si hace falta las normas sobre competencia.
Del mismo modo, ha señalado una serie de recomendaciones para lograr algunos de los objetivos que se plantea la estrategia, como los siguientes:
En 2030 deberá haberse ampliado la superficie dedicada a cultivos ecológicos.
Son necesarias iniciativas de promoción, de contratación pública y tributarias para estimular la demanda.
En España, en el año 2019 se detectó un repunte en la cantidad de productos fitosanitarios comercializados, lo que se tradujo en una subida del 2,8 % ese año, según los últimos datos ofrecidos por el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación. No obstante, este mismo estudio apunta que en los últimos años se han disminuido progresivamente los riesgos en el uso de este tipo de plaguicidas y pesticidas. En España, esta reducción fue un 4% superior que la media de la UE.
La pandemia también ha marcado los hábitos alimentarios de los españoles el pasado año 2020. Según se desprende del Informe de Consumo Alimentario en España 2020 elaborado por el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación, el consumidor español ha dado más importancia al origen de los alimentos y ha comenzado a preocuparse por adquirir productos frescos y de proximidad, prestando más atención a cómo se ha producido el alimento.
Tras la votación, Herbert Dorfmann (PPE, Italia), ponente de la Comisión de Agricultura y Desarrollo Rural, señaló que "la responsabilidad de logar que la agricultura sea más sostenible ha de ser compartida: por los agricultores y ganaderos, pero también por los consumidores. Nuestros agricultores y ganaderos hacen ya una gran labor; si les pedimos que reduzcan aún más el uso de plaguicidas, fertilizantes y antibióticos, tendremos que apoyarlos, o la producción acabará por desplazarse fuera de la Unión. Garantizar la disponibilidad de alimentos a precios razonables debe seguir siendo una prioridad".
Por su parte Anja Hazekamp (La Izquierda, Países Bajos), ponente de la Comisión de Medio Ambiente, Salud Pública y Seguridad Alimentaria, agregó: "Las actuales políticas europeas están impulsando unos modelos agrícolas perjudiciales para el medio ambiente, y allanando el camino a las importaciones de productos no sostenibles. Proponemos unas medidas concretas para que nuestro sistema alimentario vuelva a respetar los límites del planeta: estimulando la producción local de alimentos y alejándonos de la ganadería intensiva y de los monocultivos agrícolas con elevado uso de plaguicidas. Un sistema alimentario sostenible es, además, esencial para el futuro de los agricultores y los ganaderos".