Un año más, inspectores veterinarios del Servicio de Sanidad y Consumo, con la colaboración de la Policía Local, a través del GRUPRONA y de la Guardia Civil, a través del UPRONA, ha desarrollado durante la feria de Málaga el plan operativo especial de seguridad alimentaria mediante la revisión de los establecimientos que comercializan o sirven alimentos como de los vehículos que los suministran, ya sea en el recinto ferial o en la feria del Centro de la ciudad. La participación de ambos cuerpos, en coordinación eficaz con la Inspección de Sanidad ha supuesto una notable mejora de la capacidad inspectora.
La Feria de Málaga supone uno de los atractivos turísticos de mayor relevancia en la Costa del Sol. Se estima que durante los meses de verano la Costa del Sol recibe la visita de unos seis millones de turistas, y es precisamente la feria de Málaga, junto con la playa, el clima y la gastronomía, uno de los grandes alicientes para sus vacaciones. No en vano, durante los días de Feria el número de visitantes, entre alojados, excursionistas y cruceristas, pueden llegar a superar el medio millón, y si a eso añadimos la afluencia local y el turismo nacional la cifra se dispara por encima de los dos millones de visitantes.
No obstante, la interesante perspectiva de este evento, que cada año ve aumentar su impacto económico, debe ir ineludiblemente acompañada del deber de poner en el mercado únicamente alimentos seguros que no perjudiquen ni pongan en riesgo la salud de los consumidores. Ante esta situación, es la Administración la que debe de adoptar las medidas adecuadas de control que garanticen la salud y seguridad de las personas.
Como informa el Colegio de Veterinarios de Málaga, en el plan de seguridad alimentaria de la feria de este año han trabajado diariamente hasta seis inspectores veterinarios municipales que junto con los agentes de Policía Local y Guardia Civil y la colaboración de inspectores del departamento de Inspección Pesquera y Acuícola de la Agencia de Gestión Agraria y Pesquera de Andalucía han supuesto un total de hasta 16 efectivos diarios con el objetivo puesto en preservar la salud de los consumidores asistentes a la feria.
El resultado de dicho Plan ha sido que se han inspeccionado un total de 1167 vehículos, se han levantado 21 denuncias por ATP (condiciones no óptimas de los vehículos de transporte de mercancías), se han retirado de la comercialización por incumplimientos de los requisitos en seguridad alimentaria un total de 394,95 kg de alimentos (202,18 kg de origen animal y 192,77 kg de origen no animal), se han levantado 43 actas por incumplimiento de los requisitos en seguridad alimentaria del transporte, se han inspeccionado 86 casetas (la totalidad de las que servían alimentos) que han derivado en 44 actas por incidencias en seguridad alimentaria.