Juan Carlos Ortiz Menéndez
Veterinario Municipal. Presidente de AVEM
En las últimas semanas hemos podido leer diferentes noticias, a veces contradictorias, casi siempre bastante alarmistas, sobre declaraciones realizadas, según los medios, por entidades protectoras de animales. Unas, denunciando abandonos masivos de animales (perros y gatos) por las noticias negativas sobre la COVID-19 relacionada con ellos. Otras, alertando de un gran aumento de las adopciones de perros con el único objetivo de tener una justificación para eludir la orden de confinamiento en los domicilios particulares durante el estado de alarma.
He tenido la oportunidad de realizar una breve revisión en prensa escrita sobre estos temas y lo único que he encontrado han sido noticias con titulares gruesos, ciertamente alarmistas, en relación con abandonos o adopciones. Pocas, pero repetidas muchas veces en diferentes medios. Multiplicando la “esencia” del problema, como si se tratará del ARN en un equipo de PCR, tan de moda en estos tiempos. Lo que no he encontrado ha sido ni un solo dato sobre abandonos y/o adopciones que las acompañara.
Sin duda, la profunda y justificada preocupación que están pasando muchas personas durante esta pandemia ha provocado decisiones precipitadas y erróneas de abandono de un perro o un gato con el que convivía. Este patrón de comportamiento no es nuevo en estas situaciones donde la confusión y el miedo se alían. Ya ocurrió, hace muchos años, con el “síndrome tóxico” y los canarios.
Estos comportamientos injustificados, rechazables y delictivos, que se hayan podido producir debemos considerarlos hechos puntuales. Sin duda, motivados por creencias o prejuicios personales, sin ningún fundamento técnico-científico, que relacionaban la enfermedad con perros o gatos.
Durante el tiempo transcurrido desde el inicio del RD 463/2020 por el cual se declara el estado de alarma, el 14 de marzo, hasta el 15 de abril, hemos estado recogiendo los datos de los perros y gatos que han entrado en 24 centros oficiales de protección animal municipales repartidos por toda la geografía nacional. Estos centros recogen animales en 99 ayuntamientos.
Durante este mes los centros han estado cerrados al público y se han paralizado las adopciones. Aunque se ha mantenido el servicio de recogida de animales de la vía pública y los entregados por los cuerpos y fuerzas de seguridad del Estado (CCFFSSEE) y Policía Municipal. También se ha mantenido el servicio de recogida a domicilio en casos de personas enfermas, principalmente por la COVID-19, que han sido ingresadas en un centro hospitalario.
A lo largo de un año, 2018, para cada uno de los mismos centros, hemos recogido los mismos datos y hemos separado y analizado los correspondientes a marzo y abril obteniendo los mismos porcentajes.
El cierre al público de los centros ha sido un factor importante con relación al número de animales recogidos. Pero lo ha sido mucho más el estado de confinamiento de la población en sus domicilios.
Se observa una disminución muy importante, un 79,67 % para los perros y un 91,44 % para los gatos, de entrada de animales en los centros.
Una conclusión: no ha existido un abandono masivo de perros y gatos.
También hay que decir que las salidas en adopción se han paralizado. Las cifras de adopción de perros, para los centros oficiales vinculados a nuestra asociación a través de sus veterinarios, se sitúa en el 44,30 % de los perros que ingresan en los centros y del 37,25 % de los gatos.
Desde diferentes foros veterinarios, incluido el Consejo General de Colegios Veterinarios de España, se ha repetido hasta la saciedad que los “perros y los gatos no transmiten la COVID-19”. A la vista de estas cifras, los mensajes de tranquilidad realizados desde la profesión veterinaria han surtido efecto.