El estilo de entrenamiento y la calidad del sueño influyen en el desempeño y bienestar de los perros

El estudio también sugiere la necesidad de prestar atención al estrés que pueden generar técnicas menos positivas, como el regaño suave o la falta de refuerzo social. Los investigadores sugieren que futuros estudios podrían expandirse a seres humanos.

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En un estudio innovador que explora las interacciones entre emoción, aprendizaje y sueño, investigadores han comenzado a desvelar cómo estos elementos se entrelazan en el comportamiento canino, con implicaciones potenciales para prácticas de entrenamiento más efectivas y humanitarias. Realizado con 24 perros de familia, este estudio pionero no solo arroja luz sobre los procesos cognitivos de los caninos, sino que también sugiere prácticas de entrenamiento que podrían optimizar tanto su aprendizaje como su bienestar general.

El estudio, en el que participaron etólogos y veterinarios, comparó dos estilos de entrenamiento: controlador y permiso. Los perros participaron en dos sesiones de aprendizaje de comandos utilizando ambos estilos. Cada sesión fue seguida por una evaluación del rendimiento de aprendizaje, una medición de EEG de sueño de 2 horas y una reevaluación del rendimiento. Los resultados mostraron que el rendimiento de aprendizaje mejoraba significativamente después del sueño solo en la sesión donde se aplicó el estilo Permiso, indicando que una experiencia más gratificante de lo esperado mejora el éxito de aprendizaje tras el descanso.

Además, se observó que el rendimiento de aprendizaje era superior durante la primera sesión de entrenamiento, lo que sugiere que el éxito en la segunda sesión podía estar influenciado por interferencias proactivas, es decir, la información aprendida previamente afectaba la adquisición de nueva información. Intrigantemente, la mejora en el rendimiento de aprendizaje después del sueño no se asoció con cambios en la macroestructura o los espectros del sueño, aunque el tipo de entrenamiento sí afectó estas estructuras del sueño.

Este descubrimiento subraya la relevancia de las técnicas de entrenamiento y la calidad del sueño en la capacitación de los perros, destacando especialmente la eficacia del refuerzo positivo. El estudio también sugiere la necesidad de prestar atención al estrés que pueden generar técnicas menos positivas, como el regaño suave o la falta de refuerzo social, que fueron suficientes para provocar comportamientos de búsqueda de proximidad hacia el dueño en los perros estudiados.

Dado el impacto significativo de estas interacciones en los perros, los investigadores sugieren que futuros estudios podrían expandirse a participantes humanos, utilizando diseños de investigación similares para explorar más a fondo los paralelos entre humanos y caninos. Este tipo de investigaciones no solo beneficia la comprensión científica de los procesos de aprendizaje y emocionales en los perros, sino que también tiene importantes implicaciones para mejorar las prácticas de entrenamiento y el bienestar animal en general.

Reicher, V., Kovács, T., Csibra, B. et al. Potential interactive effect of positive expectancy violation and sleep on memory consolidation in dogs. Sci Rep 14, 9487 (2024). https://doi.org/10.1038/s41598-024-60166-8