El bienestar animal se ha convertido en un aspecto fundamental para la ganadería pero su evaluación es complicada. En declaraciones publicadas por la Universitat Autònoma de Barcelona (UAB), Xavier Manteca, investigador del Departamento de Ciencia Animal y de los Alimentos de la UAB y coordinador del proyecto, explica que quieren fomentar la innovación y aprovechar al máximo la tecnología para lograr un mejor bienestar en toda la cadena de producción, tanto de ganado porcino como de vacuno lechero. Esto ayudaría a lograr una producción más sostenible en los dos sistemas ganaderos más productivos de Europa.
ClearFarm, financiado con 6 millones de euros por la Comisión Europea, es un proyecto que durará cuatro años y que está liderado por la Facultat de Veterinària de la Universitat Autònoma de Barcelona (UAB) que involucra a un total de 13 instituciones europeas de seis países diferentes: seis universidades y centros de investigación, cinco pequeñas y medianas empresas y tres grandes empresas:
Su objetivo principal es tener una imagen a tiempo real del bienestar de cada uno de los animales de una granja y, para ello:
ClearFarm utilizará sensores, ya existentes en el mercado, que son capaces de controlar una amplia gama de variables relacionadas con:
Para ello se colocaran, por ejemplo, collares con sensores a las vacas y cerdos o cámaras térmicas que permitirán saber cómo se mueven por la granja, cuántas veces van a comer o beber, etc. También se colocarán sensores ambientales para obtener información sobre los espacios donde están los animales (temperatura, humedad, CO2, etc.).
Estos datos los recogerá una plataforma conectada que, mediante un algoritmo, proporcionará una información fácil de entender sobre el bienestar de los animales adaptada a cada público, de manera que:
La plataforma se pondrá a prueba en diferentes explotaciones de ganado porcino y lechero de diferentes países. El objetivo es que sea capaz de informar sobre el estado de bienestar en una amplia variedad de sistemas de producción y teniendo en cuenta las divergencias geográficas dentro de los sistemas de producción existentes en Europa.
Un aspecto innovador del proyecto es que consumidores, productores, reguladores y responsables políticos, entre otros, están involucrados desde el inicio en el diseño de esta nueva plataforma.
Durante los meses de octubre y noviembre se organizan diferentes talleres con consumidores y ganaderos para conocer sus necesidades y preferencias en relación con el bienestar animal y las mejores soluciones para encararlo. “A través de metodologías de design thinking queremos reunir todos los actores relevantes, porque sus necesidades, ideas y sensibilidades estén plenamente representadas, y asegurarnos que la plataforma tecnológica que desarrollamos se ajuste a sus requisitos”, señala Xavier Manteca.