Fuente:Associated Press
Además de los cóndores, ave que figura en el escudo nacional, fueron recuperadas y liberadas dos águilas Moras, típicas de los cielos chilenos.
Los veterinarios del Zoológico Nacional del Parque Metropolitano que curaron a las aves, recordaron que la exhibición de animales en cautiverio no es la única finalidad del recinto. Es "por sobre todo, la conservación, recuperación y reinserción de nuestro patrimonio natural", dijo su directora Teresa Rey a la prensa.
Las aves fueron liberadas en los faldeos precordilleranos que conducen al centro de esquí invernal de Farellones, al este de la ciudad.
Uno de los cóndores, de tres años de edad, fue encontrado en agosto con sus plumas dañadas, sin poder volar, en medio de un orinal de vacas, la otra, una hembra de dos años, fue ubicada a un costado de una carretera, agónica e intoxicada, con restos de perdigones en el cuerpo.
El cóndor es básicamente monógamo, tiene una sola pareja hasta que ella se muere. Además, tiene una muy baja tasa de reproducción, que se traduce en una cría cada dos o tres años. El polluelo tarda en desarrollarse, permanece en el nido unos seis meses y luego depende de sus padres otro año y medio antes de independizarse.
Los cóndores alcanzan su madurez sexual a los ocho o diez años y pueden vivir hasta los cincuenta.
El jefe del zoológico, el médico veterinario Mauricio Fabry, denunció que la mayoría de las veces los cóndores han sido heridos, envenenados o maltratados por humanos.